La Conselleria de Sanidad baraja convertir a los más de 1.700 trabajadores del hospital y el Departamento de Salud de la Ribera que no son personal estatutario en contratados laborales indefinidos no fijos, según ha podido saber Levante-EMV. Esta es la fórmula de reversión que ofrecerá a los sindicatos el departamento de la consellera Carmen Montón para cumplir su promesa de garantizar los empleos de esta Área de Salud cuando el 1 de abril de 2018 la Generalitat recupere la gestión tras su privatización en 1999.
Esta propuesta se podría plasmar en la reunión que mantendrá esta mañana el comité de empresa del Hospital de La Ribera con el subsecretario de Sanidad, Ricardo Campos. El cónclave llega después de que el comité de empresa del Departamento de Salud de la Ribera se haya quejado por escrito a la conselleria del retraso en la constitución de la comisión técnica que prometió crear para seguir el proceso de reversión a la conselleria del primer hospital público de gestión privada que creó el Consell del PP hace 18 años.
El comité de empresa también solicita conocer las conclusiones del informe jurídico sobre la integración del personal no estatutario de esta área de salud en la gestión pública así como el dictamen del comité de expertos creado para estudiar las diferentes alternativas a este respecto.
Figura extraordinaria
El contrato de personal laboral indefinido no fijo es una figura extraordinaria a la que recurre la Administración en los casos en los que pierde las demandas interpuestas por trabajadores no funcionarios a los que ha despedido.
La conselleria carece de fórmulas legales para convertir en funcionarios o personal laboral indefinido fijo a trabajadores como los del área de la Ribera que han sido seleccionados por una empresa privada sin seguir el principio de igualdad absoluta de trato en el acceso al empleo que rige en la contratación pública, que a su vez se concreta en los principios de mérito, capacidad y publicidad.
No obstante, el recurso a la figura del laboral indefinido no fijo es algo temporal pues la conselleria por ley debe incluir progresivamente dichos puestos en una Oferta Pública de Empleo (OPE). Es decir, que conforme se sacaran dichas plazas del Área de Salud de la Ribera a oposición, se irían extinguiendo los contratos laborales indefinidos no fijos.
Una extinción a la que se oponen de plano los sindicatos, y muy especialmente UGT, que rechaza la falta de estabilidad de la propuesta de conselleria de cara a la continuidad de la plantilla del Hospital de Alzira en sus puestos de trabajo.
Si se opta finalmente por la fórmula del laboral indefinido no fijo, los representantes de los trabajadores quieren obtener el compromiso de conselleria de una moratoria en la convocatoria de oposiciones en este departamento. Un acuerdo que, a medio y largo plazo, expondría a la Generalitat a un aluvión de demandas por ocupar personal de una contrata puestos de trabajo de gestión pública.
Solución transitoria
UGT propone a Sanidad que cree una fundación para gestionar el área de la Ribera, lo que permitiría la coexistencia del personal estatutario con los contratos privados actuales. Esta fórmula es a la que se recurre en la mayoría de casos en los que se han nacionalizado servicios o éstos se han revertido a la gestión pública tras la conclusión de una concesión.
En este segundo caso, al igual que en el de la integración de la plantilla como laboral indefinida no fija, la solución sería transitoria porque la Administración está obligada a sacar los puestos de trabajo a concurso a través de una Oferta Pública de Empleo (OPE).
