La Conselleria de Sanidad ha garantizado de nuevo que «mantendrá los puestos de trabajo» de los 1.700 contratados laborales del Hospital de Alzira que no son personal estatutario cuando a partir del 1 de abril de 2018 culmine el proceso de reversión a la gestión pública del área de salud de la Ribera privatizada en 1999. Así lo asegura el comité de empresa del hospital, que ayer se reunió durante una hora y media con el número tres del departamento de la consellera Carmen Montón, el subsecretario Ricardo Campos.

Los representantes de los trabajadores informan en un comunicado a la plantilla que conselleria «no va a comunicar aún el modelo ni la figura jurídica» por la que optará para integrar a los trabajadores de Régimen General en la gestión pública. Actualmente el área de salud de La Ribera cuenta con alrededor de 2.000 empleados, de los que sólo 300 son personal estatutario. Éstos últimos, médicos y enfermeras en su práctica todalidad, se concentran en los centros de salud de Primaria, mientras que el 95 % de la plantilla del hospital de Alzira son contratados laborales.

Los representantes de la conselleria en la reunión con el comité de empresa no han confirmado a los trabajadores, ni tampoco desmentido, la información avanzada en exclusiva el jueves por Levante-EMV de que Sanidad baraja la figura extraordinaria de personal laboral indefinido no fijo cómo fórmula para integrar a la plantilla no estatutaria a la gesión pública. «La conselleria afirma rotundamente no ser la fuente de esta información, además también dice que este tipo de noticias solo generan más ansiedad en los profesionales y solo benefician a una parte», se lee en el comunicado del comité.

El portavoz del Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (Simap) en el área de la Ribera y miembro del comité de empresa, Pedro Durán, insiste en que los sindicatos rechazan esta figura. «El no fijo porque al final equivale a un contrato temporal y eso va a crear un conflicto, pues lo que los trabajadores queremos es jubilarnos en nuestros puestos», advierte.

«La figura que van a elegir para integrar a la plantilla nos dicen que no la van a anunciar todavía», destaca Durán. No obstante, el comité en su nota expresa que la conselleria les ha transmitido «que la opción elegida va a cumplir con nuestras expectativas y va a satisfacer tanto al personal laboral como estatutario, porque quieren una transición pacífica».

Retraso en la comisión técnica

El comité había solicitado esta reunión ante el retraso de un mes en la constitución de la comisión técnica que debe abordar la integración del personal del Departamento de Salud de la Ribera a la gestión pública. Esta comisión no se puede crear hasta que se concluya el Plan de Ordenación de Recursos Humanos (PORH) de la conselleria. «Nos han explicado que pensaban tener el PORH en enero, pero la cuestión de las jubilaciones de los médicos a los 65 o 70 años ha retrasado su cierre, que aseguran que culminará esta semana», detalla Durán.

El siguiente paso es redactar los planes específicos para abordar no sólo la reversión del modelo Alzira sino también la de las resonancias, o del futuro del antiguo hospital La Fe. A partir de aquí es cuando se creará la comisión técnica, en la que junto a conselleria estará también el comité de empresa.

Respecto al informe jurídico-consultivo que ha encargado la conselleria a la Abogacía de la Generalitat y a expertos de la Universitat de València en Régimen laboral, Sanidad ha transmitido al comité que está muy avanzado «pero apelan a la prudencia absoluta y piden no precipitar las cosas pues quieren tenerlo todo atado jurídicamente», concluye Durán.

La plataforma Sanitat Sols Una constituida por personal sanitario del Hospital de Alzira que defienden la continuidad de la gestión privada asegura en un comunicado que con la figura del laboral no fijo «ningún trabajador tiene el puesto asegurado». «Sin el modelo Alzira, la conselleria convocará oposiciones y 1.700 personas perderán su empleo», añaden.