La puesta en marcha de la tarjeta monedero TuiN que Ferrocarils de la Generalitat Valenciana (FGV) implantó el pasado mes de noviembre, conlleva grandes ventajas para los usuarios, pero también algún inconveniente. El Título de Abono Temporal (TAT) y mensual se ha visto absorbido por esta tarjeta monedero, que permite a los usuarios utilizar toda la red y pagar el coste de cada viaje hasta un importe máximo al mes, siendo el resto de viajes gratis.
No obstante, usuarios explican a Levante-EMV que si multiplican el importe máximo que pueden recargar en su tarjeta monedero al mes por los 12 meses que tiene un año, la cifra total es superior a lo que pagaban con el TAT anual. Por ejemplo, para una zona, el título anual valía 359 euros y con la TuiN el desembolso total de un año llega a los 492 euros (41 euros -que es el máximo de la tarjeta monedero para una zona- multiplicado por 12).
Fuentes de FGV aseguran que, dentro del volumen global de viajeros, «el título anual era muy escaso» y lo usaban «un porcentaje muy bajo de viajeros», unos 400. Entre las ventajas del cambio, destacan que se consume «en función de lo que gastas y cuando se llega a un tope no se cobra más»; y que los ciudadanos no deben adelantar «el gran desembolso». Además, consideran que el TAT se limitaba solo a los «usuarios que tienen muy claro que no van a fallar durante todo el año».
«Un servicio muy justo»
«Yo la utilizaba porque el metro es lo más cómodo y por conciencia medioambiental, para contaminar menos», explica un vecino de Foios afectado con el cambio. «El TAT era bueno porque te anima a coger el metro: una vez ya hacías 10 viajes, el resto era gratis y te salía más rentable que comprar el bono mensual», asegura. Él, calcula que deberá pagar un 30 % más, y en su caso no se beneficia de la congelación de tasas ni de ningún otro descuento de Metrovalencia (familias numerosas, monopatentales...).
Sobre todo, lamenta que a los cambios «se suman los recortes que efectuaron por la crisis». «Suben el precio de un servicio muy justo, que no cuadra para ir a trabajar los fines de semana o por la noche», asegura.
Desde Ferrocarrils admiten que hay situaciones personales en las que los usuarios pueden salir perdiendo y por ello han tenido una veintena de reclamaciones. No obstante, insisten en que la TuiN no obliga a gastarse un importe fijo al mes, ya que varía según los viajes, por lo que habrá meses en los que los viajeros ahorren y «se pagarán menos», como en vacaciones o periodos festivos, días que no se descontaban con el TAT.
«Entendemos que la TuiN aporta ventajas más generales a viajeros habituales y sin limitar las zonas», explican.
La integración de abonos «se enmarca en el objetivo de la simplificación del sistema de títulos de transporte propios de FGV y la implantación paulatina de la tarjeta monedero TuiN».
Algunos de estos cambios ya se han realizado, pero desde FGV están «a la espera de que la Entidad Metropolitana de Transportes se ponga en marcha y determine los títulos definitivos», tanto de Metrovalencia como de los otros servicios de transporte público de la zona.
Las TAT cargadas antes d el 31 de diciembre de 2016 son válidas hasta su fecha de caducidad.
