? La visita de un grupo de vecinos de Morella al Palau de la Generalitat coincidió ayer con la comparecencia en las Corts del alcalde del municipio, Rhamses Ripollés. Como presidente también de la empresa Carns de Morella, criticó el «linchamiento continuo» que a su juicio ha tenido «cualquier proyecto» de esta empresa por el «gran pecado» de ser de la capital de la comarca de Els Ports. «Si esta empresa no fuera Carns de Morella no tendría ningún problema», aseguró durante su intervención en la comisión sobre la viabilidad de los mataderos públicos, donde subrayó que desde que la empresa se creó en 2004 no ha recibido «ninguna subvención». Iba a recibir 140.000 euros, contemplados en los presupuestos del Consell para 2016, y fue sustituida por convenios para mataderos de gestión mixta.