Una carta pidiendo la complicidad de todos los diputados y senadores valencianos en Madrid, el pronunciamiento de la vicepresidenta y portavoz del Consell sobre el nivel de hartazón del ejecutivo y una comparecencia de los principales cargos institucionales de Compromís. La presión de los políticos para acabar con «la anomalía democrática secular» del déficit estatal de inversiones en la Comunitat Valenciana subió ayer un escalón más.
Estas actuaciones se producen después de que, como adelantó Levante-EMV el pasado jueves, el presidente de las Corts, Enric Morera, planteara un compromiso de todos los parlamentarios valencianos para no respaldar los presupuestos del Estado que el Gobierno de Mariano Rajoy ultima si no contemplan una inversión equiparable a la población valenciana (el 10 % del total de España).
La iniciativa se plasmará en una proposición no de ley que se llevará al pleno de las Corts, pero el presidente de la institución ha remitido además un escrito a todos los diputados y senadores valencianos en Madrid para pedirles, «con todos los respetos», que exijan «la aplicación del principio de equidad en las inversiones del Estado». «Si es legítimo luchar contra las desigualdades territoriales, quien representa al pueblo valenciano ha de procurar el bienestar de la ciudadanía y, por eso, hemos de acabar con la anomalía que compartimos». Se refiere, en detalle, a «la discriminación fiscal, financiera e inversora por parte del Estado».
Aunque Mónica Oltra se pronunció ayer como vicepresidenta del Consell y Morera actúa como presidente de la institución que representa a todos los valencianos, ambos son dirigentes de Compromís, la formación que también sacó ayer a su nómina de altos representantes para refrendar este frente por las inversiones.
La formación valencianista tiene más fácil una actuación coordinada en Valencia y Madrid dado que no tiene dependencias de un grupo parlamentario estatal, como sucede al PSPV, que ha adoptado un perfil más bajo. Con todo, el propio presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, afirmaba el jueves su apoyo al planteamiento del presidente de la Cámara, al tiempo que recordaba que él mismo ya lanzó la oferta de una posición común hace pocos meses.
En la misma línea se mostró Oltra durante la rueda de prensa posterior al pleno del Consell. «Entra dentro de las funciones del presidente de las Corts llevar a cabo este tipo de iniciativas. Si hay un acuerdo unánime en el parlamento valenciano, el presidente tiene que velar para que no sea papel mojado», defendió la portavoz del Ejecutivo valenciano. Se refería así a algunas de las críticas que se han escuchado de Ciudadanos y PP respecto a la competencia de Morera de orquestar esta acción conjunta que implicaría a los 33 diputados valencianos en Madrid.
Aunque las reivindicaciones del Consell en este sentido son constantes, ayer su portavoz parecía especialmente molesta. Se preguntó si es necesario «montar un pollo, como hacen en otras comunidades autónomas», para que «nos hagan caso». Apuntó Oltra al «refuerzo negativo» que está haciendo el Gobierno de Mariano Rajoy al compensar «a las autonomías que crean conflicto. Está marcando el camino a seguir», añadió la vicepresidenta del gobierno autonómico.
Además, Oltra lanzó un aviso a navegantes. «La paciencia del gobierno valenciano está a punto de acabarse», advirtió.
Aliviar a los consistorios
En la misma plaza pero en el palau de enfrente, el de Batllia, distintos cargos de Compromís defendían que los presupuestos que prepara Montoro aflojen la presión sobre los ayuntamientos. En concreto, pidieron que se prorrogue la disposición adicional 6ª que permite a los ayuntamientos poder gastar el superávit que generan. «Se tiene que flexibilizar el techo de gasto», apuntó la vicepresidenta de la Diputación de València, MªJosep Amigó.
Acompañada por el diputado en el Congreso Joan Baldoví, la secretaria autonómica de Hacienda Clara Ferrando, el vicepresidente de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) Quico Fernández y el portavoz de Compromís en la corporación provincia Xavi Rius, los representantes de la coalición quisieron escenificar ayer el «golpe encima de la mesa», en palabras de Rius, que la postura del gobierno central con los valencianos «ha provocado».
Baldoví señaló que hay 18.000 millones de euros en depósitos estériles en los ayuntamientos, «que no valen para nada» porque no se pueden gastar. La secretaria autonómica puso el ejemplo de Meliana, municipio de l´Horta Nord que cuenta con 620.000 euros de superávit que «no puede invertir en un solar para un colegio. No tiene deuda, y cuenta con un remanente en tesorería de 1,7 millones», indicó Ferrando.
Fernández apeló a la Constitución y a «la autonomía que esta consagra» en materia presupuestaria. «Es como poner a dieta a una persona con desnutrición; acabas matándola».
