Sandra Mínguez no competirá por la dirección de Podemos en la Comunitat Valenciana. Tras su destitución como secretaria de organización del partido morado, la diputada ha sido la principal cabeza visible del sector crítico con el actual líder, Antonio Montiel. Sin embargo, hoy ha confirmado a través de un comunicado que se apartará de los cargos orgánicos.
"A partir del 21 de mayo dejaré de tener responsabilidades orgánicas en Podem, pero continuaré como diputada en las Corts para cumplir con la confianza depositada por tanta gente, especialmente en políticas de educación", afirma Mínguez en el escrito.
La decisión hay que vincularla al hecho de que en el proceso de renovación del partido a nivel estatal quedara fuera del equipo de Pablo Iglesias, cuyo movimiento interno ha respaldado activamente en los últimos meses.
"No me voy a presentar como Secretaria General a la segunda Asamblea Ciudadana Valenciana de Podem. Es una decisión que llevo meditando desde hace semanas, muchas personas a las que quiero me han animado para que diese el paso y fuese una de las portavoces de una candidatura renovadora para Podem, pero finalmente he decidido renunciar a ocupar un nuevo puesto de responsabilidad orgánica", explica la diputada.
Mínguez defiende que en los 3 años de historia de Podemos se ha dejado la piel, "primero trabajando en labores de organización y como una de las portavoces del círculo de Podemos València, después en la secretaría de organización autonómica. Me he esforzado en ser útil para la mayor herramienta del cambio del país desde la transición y he criticado los errores que creo que se han cometido en el Consejo Ciudadano Valenciano: errores sobre la falta de hoja de ruta valenciana, sobre la incapacidad de integrar las diferencias en los debates y errores sobre el arraigo en el territorio. He recibido críticas y halagos en estos 3 años, pero estoy tranquila por haber sido honesta y generosa en cada minuto que le he invertido a Podem".
