Miles de familias han decidido el horario que 326 centros escolares de Educación Infantil y Primaria implantarán a partir del curso que viene. La Conselleria de Educación hará públicos los resultados hoy de los 162 colegios de València, 97 de Alicante y 67 de Castelló que ayer realizaron la votación para decidir si aplican, o no, la jornada escolar continua en 2017-2018.

Las familias consultadas por Levante-EMV que votaron en el CEIP Ciudad de Bolonia de València, uno de los autorizados por Educación, se mostraban divididas ante la propuesta. «Yo que tengo la nena de los más pequeñitos, creo que son demasiadas horas seguidas. Los mayores se pueden amoldar, pero en Infantil es excesivo», opina Xusa, una de las madres que ayer hacía cola para votar a las 9 horas.

En la misma línea se mostraba Gabriel. «No se han mirado otras opciones más allá del horario de 9 a 14 horas. Darles a los niños de tres años cinco horas seguidas y que coman a las 14.45 horas y otros a las 15.30 es muy exagerado, en otros países de Europa no se hace así», explicaba.

Pero por otro lado, padres como Toni sí se decantaban por la jornada continua. «Venir a las 12.30 horas a por el chiquillo me corta la mañana de trabajo. Tengo que cerrar la tienda para recogerlo y luego volverlo a traer», explicaba. Nosakhare también prefería el cambio horario porque «no tenemos abuelos para ayudarnos y recogerles. El horario actual es poco flexible y el poco tiempo de la tarde no sirve», opinaba este padre.

Algunas madres, como Laura, están a favor del cambio de horario, pero no les acababa de gustar el proyecto que se había propuesto. «No me gusta el reparto de las horas ni la organización, querría mejorarlo para el año que viene», apunta esta madre.

Lorena, por su parte, padecía por saber cómo se iba a organizar si había cambios, «con la poca conciliación familiar y laboral que hay en España...», lamentaba.

Lo que si agradecía toda la comunidad educativa es la posibilidad de votar; «siempre es bueno», comentaban en la cola para depositar la papeleta en la mesa habilitada para la ocasión, desde las 9 hasta las 19 horas.

«Esperamos que la jornada transcurra con normalidad. Se han dado charlas informativas y queremos que la gente participe, quieran o no el cambio. Ha habido mucho interés, incluso quienes no son muy activos en el colegio han preguntado y se han implicado», detallaba Luis del Pino, presidente del Ampa. Desde la dirección del centro también afirmaban que lo más importante era «saber la opinión de las familias» y, si se aprueba un cambio -se necesita el 55 % de votos-, «lo gestionaremos lo mejor posible», aseguraban.

El año pasado, de los 315 colegios en los que se realizó la consulta, se aprobó un cambio horario en 303, la gran mayoría públicos. De implantarse la jornada continua en todos los que votaron ayer, ya sumarían el 58,6 % de centros valencianos. Esta consulta es la más multitudinaria que ha habido hasta la fecha, desde que en junio de 2016 se posibilitó el cambio horario. El STEPV recuerda que «la gran mayoría de territorios lo tienen desde hace más de 20 años»; y la CSI-F acusa a la conselleria de «falta de implicación en el proceso» y no facilitar actividades extraescolares.