Alexis Marí empieza a ser historia en Ciudadanos. La ejecutiva nacional del partido de Albert Rivera decidió ayer apartarlo de la portavocía del grupo parlamentario en las Corts y proponer a la hasta ahora adjunta, Mari Carmen Sánchez, para el cargo.

La decisión coincide con el acto contra los presupuestos de Mariano Rajoy convocado hoy por las Corts y que Marí ha apoyado en contra de la posición de Cs en Madrid. No obstante, la caída del portavoz estaba cantada. «Podía haber sido en marzo o en mayo», subrayaba ayer un dirigente estatal de la formación naranja a Levante-EMV. «Una cuestión de confianza», resumía.

Se refería a la posición crítica de Marí al giro hacia el centroderecha del partido. Él, procedente de UpyD, estaba con su actual esposa, Carolina Punset, por un Cs de orientación socialdemócrata.

Podía haber sido antes o después, pero fue ayer. Así que Marí se va «casi como un héroe», admitían ayer compañeros del grupo. Y fue una decisión tan importante como para que el número dos de Cs, José Manuel Villegas, se desplazara a València ayer mismo, menos de tres horas después de informar en Madrid de los acuerdos de la ejecutiva.

Junto a otro mando naranja, Fran Hervías, se reunió con parte del grupo de Cs en las Corts (seis diputados de trece, aunque al final eran siete, porque se incorporó Antonio Woodward), convocado de urgencia. No estuvo Marí. Sí la que será su sustituta si el grupo la refrenda en votación. Para esta habrá que esperar algo, porque Juan Córdoba, uno de los pesos pesados de Cs en las Corts, está en Austria por un congreso profesional. Pero debe ser un mero trámite. De hecho, el partido la daba ayer ya como portavoz.

«Había una exigencia de que se dieran soluciones», porque «había cosas que no estaban funcionando bien», dijo Villegas. Es el mensaje que reiteró ante el grupo: que el objetivo es «una mayor cohesión» y «una estrategia política mucho más clara y definida».

Marí no habló ayer, aunque se manifestó a través de Twitter: «2.200 € dan para mucho en una nómina, pero no para comprar almas. La mía no». Sánchez agradeció «la confianza depositada» a través de un comunicado. «Estamos en el ecuador de la legislatura y queda mucho trabajo por delante, con vistas a 2019», añadió ante un reto que plantea dudas entre los propios diputados de Cs.

El ya exportavoz no abandona, al menos de momento, Ciudadanos, a pesar de los comentarios sobre un posible paso al grupo de no adscritos con algunos de los diputados más afines: David de Miguel, Alberto García y Domingo Rojo. Es lo que comentó ayer a su entorno. Mantiene además su intención de estar hoy en el acto de las Corts.

Marí no es el único laminado. García también dejará de ser el segundo portavoz adjunto, si bien el partido no confirmó este extremo oficialmente. Ayer se mostró especialmente duro en el encuentro con Villegas, según las fuentes consultadas. Se ve más fuera que dentro, llegó a decir. El que sale reforzado es Córdoba (a pesar de las grabaciones en sede parlamentaria denunciadas por el PP) y su grupo, más crítico con el tripartito: él pasará a ocupar el puesto que deja Sánchez.

El grupo queda más que tocado. Casi dinamitado. La fractura queda patente con hechos. Marí se convierte en el primer portavoz autonómico de Cs fulminado.

Y todo en el día de gloria de Emmanuel Macron (el Rivera francés).