El que fue ministro de Educación y del Interior, así como secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, hizo un amago de moción de censura en 2013, cuando el extesorero del PP, Luis Bárcenas, aseguró ante un juez que el presidente del Gobierno y otros miembros de su partido recibieron sobresueldos durante años. Finalmente no la presentó, no tenía mayoría. Aun así, no vio paralelismo entre aquella situación y la que planteó ayer Unidos Podemos en el Congreso. «No se me había ocurrido», apuntó.

Según explicó minutos antes de impartir una conferencia sobre educación en la Universitat de València, «cuando uno quiere sacar adelante una moción, primero se dialoga y después se anuncia, y eso lo sabe Pablo Iglesias. Es una trampa, y lo que hay que hacer es desactivarla y que la gente se dé cuenta de que no vamos a caer en ella». Rubalcaba añadió que Podemos «frivoliza» con asuntos «muy serios».

Preguntado sobre si es necesario o no plantear una moción de censura en el contexto de corrupción actual, o si la debería haber propuesto el PSOE, el exministro redirigió el asunto hacia Podemos, en la línea de dirigentes socialistas como Susana Díaz. «El problema no es si hay motivos o no para una moción, es la metodología. Si quieres que salga, hay que pactarla. Iglesias se acaba de cargar el debate, le ha hecho un favor a Rajoy», lamentó.

Subió el tono Rubalcaba cuando rememoró que «es la segunda vez que nos pasa: la misma gente, la misma foto. Pero, ¿qué se ha pensado este señor que es el PSOE? ¿Se que ha creído que somos todos tontos?»

Rubalcaba, que se encontró minutos antes con el presidente Ximo Puig en el Palau, asumió que «el PSOE tiene un problema» de pérdida de votos y que «es momento de que la militancia elija a aquel que puede solucionarlo», dijo en relación a las futuras primarias. «Es preocupante que el PSOE saque peores resultados con el peor PP».