Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Diseño de las urbes

Ciudades que no excluyan a las mujeres

La Conselleria de Vivienda reorienta las políticas sobre urbanismo para incorporar la perspectiva de género - Impulsa un plan de choque para lograr que el diseño de las urbes no sólo atienda a las necesidades de los hombres

Ciudades que no excluyan a las mujeres

Decía Jean-Jacques Rousseau que las ciudades eran «el abismo de la especie humana», pero quien conozca mínimamente la obra del pensador ginebrino podrá deducir que su reflexión iba dirigida exclusivamente a los hombres. Pensar en si las ciudades (como concepto opuesto a la naturaleza) eran o no lugares inhóspitos para las necesidades físicas y anímicas de las féminas sería seguramente lo último en lo que pensaría un hombre que, como la mayoría de los ilustrados de aquella época, hacia gala de una misoginia que hoy, de conservarla, se vería obligado a ocultar. Dos siglos y medio después, la sociedad nada tiene que ver con la que inspiró al autor del «Contrato Social»: ni las mujeres están en la situación de opresión de entonces, ni las ciudades son recintos de podredumbre.

Ahora bien, salvando las distancias, la ciudad sigue siendo, en términos generales, un lugar más amable y cómodo para ellos que para ellas, ya que la planificación urbanística, fruto al fin y al cabo del patriarcado, ha carecido de perspectiva de género. De hecho, está diseñada para atender a las necesidades de los hombres, mientras que ignora las que, fruto de la desigualdad, son más específicas de las mujeres.

El nuevo Consell parece, sin embargo, decidido a dar un giro a las políticas urbanísticas para que las ciudades de la Comunitat Valenciana, parafraseando a Rousseau, resulten menos «abismales» para ellas. Con este propósito la titular de Vivienda, la socialista Maria José Salvador, ha activado toda una serie de medidas que incluso han logrado el reconocimiento del Banco Interamericano de Desarrollo de Washington.

Entre las iniciativas propuestas, destaca la bautizada como «el kit de igualdad», una suerte de decálogo para todas aquellas personas implicadas en la planificación urbanística y cuyo fin es lograr urbes que atiendan las necesidades diarias de las mujeres. La guía actúa sobre siete conceptos: el modelo de la ciudad, los espacios públicos y la accesibilidad; la seguridad, la movilidad, la vivienda y la participación ciudadana. Ámbitos que lejos de lo que podría pensarse no son neutrales a efectos de género.

Imagine, por ejemplo, el mapa de la ciudad de València y visualice a las mujeres y a los hombres que se desplazan por ella. Nuestro mapa imaginario de movilidad con perspectiva de género le mostrará, con poco margen de error, como ellas se mueven a lo largo del día en múltiples direcciones (casa-trabajo-compras-estudio-cuidados), mientras que la pauta de ellos es un movimiento pendular (casa-trabajo o casa-estudios). Verá también como ellas usan más que ellos el transporte público y caminan más. Pregunte también a ellas qué percepción tienen sobre la seguridad en las calles y comprobará que es muy distita a la que tienen los hombres, tal como certifican numeros estudios hechos en la materia.

El problema es que ni los transportes públicos (frecuencia y trazados de autobuses, metros, etc), ni los equipamientos (zonas verdes, de lactancia, residencias, etc) ni siquiera el alumbrado de las calles o los patios de los edificios cubren las necesidades psicológicas y físicas de las mujeres. Ellas, además de la amenaza de la violencia de género sufren la consecuencia de la doble jornada laboral al asumir el rol reproductivo y de cuidados a los demás, pero viven en urbes que dan la espalda a estos problemas.

En 2016, Vivienda creó un grutrabajo de género (con especialistas con poder de decisión en el diseño y la planificaciónde la ciudad) para hacer diagnósticos y sensibilizar a la sociedad sobre la importancia del perspectiva de género. Hay experiencias más concretas como la Mesa de Rehabilitación o el documento «Género y Política urbana» o los premios Vivienda.

Compartir el artículo

stats