Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista

Antonio Rodes: "El impacto de los grandes proyectos es limitado. Con el PP hubo gestión negligente y derroche"

Antonio Rodes, antiguo portavoz del PSPV en Elx, fue elegido por Ximo Puig para capitanear Proyectos Temáticos

Antonio Rodes: "El impacto de los grandes proyectos es limitado. Con el PP hubo gestión negligente y derroche"

Con la gestión que ha tenido Proyectos Temáticos durante las dos décadas del PP en la Generalitat y con un «agujero» que se acerca a los 700 millones, ¿por qué debe continuar abierta?

La idea de mantener Proyectos Temáticos es una apuesta del presidente Ximo Puig con el aval del conseller de Hacienda, Vicent Soler. Creo que hay una serie de criterios técnicos en esa decisión que son claves. Cuando el PP se da cuenta de su mala gestión y del derroche que ha generado, hace algo muy curioso para tratar de defenderse: intenta acabar con el instrumento que ha utilizado para que se hicieran las cosas tan mal. Y se equivocan. A lo que se tiene que poner freno es a las malas decisiones y a la voluntad de hacer esas cosas mal. La disolución de Proyectos Temáticos hubiera supuesto una diáspora de derechos, obligaciones, contratos, proyectos, pleitos... que se hubieran tenido que repartir entre los diferentes entes y consellerias. Y con eso se producía un debilitamiento de la posición de la Generalitat. Era mejor que se mantuvieran todos dentro de Proyectos Temáticos. Era más eficaz para la administración: coger el balance y adecuarlo a la realidad, cuantificar activos improductivos y saldarlos, intentar llegar a una solución con los pleitos, resolver contratos y obligaciones... Eso era técnicamente mejor.

¿Por qué el último gobierno del PP llegó a querer su cierre?

Medidas de este tipo se tomaron muchas. Derrocharon y fueron terriblemente negligentes en el gasto, pero luego, cuando venían las duras, eran cobardes. El problema no era Proyectos Temáticos sino quién tomó la decisión de gestionar así. Con el cierre de esta empresa pública no se corregiría una gestión tan desafortunada e ineficaz como la que hizo el PP. Y cabe, en mi opinión, una reflexión más: ¿La política de eventos y grandes proyectos para el desarrollo económico es acierto o fiasco? Para mi, las ventajas de este modelo son muy moderadas. Puede tener algún resultado pero sólo si se hace bien.

¿Hay manera de recuperar, como mínimo, una parte del dinero que ha perdido la administración en Proyectos Temáticos?

Hay posibilidad de recuperar algo pero tenemos inversiones que ya se han volatilizado. Y lo que quede, tiene el valor adjudicado por el mercado que es muy inferior al marcado en su día. De todo lo que se ha destinado a la empresa, sólo la mitad se empleó en aquello que se puede tocar. El resto se esfumó en «números rojos», esponsorizaciones, patrocinios, Fórmula 1, ayudas a clubes de fútbol... Eso se ha perdido ya. ¿Qué queda? El inmovilizado físico...

Habla de todo lo que se invirtió en diferentes instalaciones...

Sí. Y un ejercicio que habría que hacer es ver si realmente los edificios tenían que haber costado lo que costaron.Y tampoco el valor de mercado, desde luego, es el que figura en el balance. Seguro que es inferior. Yo me encontré, por ejemplo, que en el plan del entorno de Terra Mítica, las parcelas situadas junto al parque tenían un valor neto contable tras las amortizaciones de 86 millones. Lo hemos tenido que deteriorar para adaptarlo a una realidad y hoy valen sólo 30.

¿Pasa lo mismo con la participación en proyectos o empresas?

Claro. Por ejemplo, la participación de Proyectos Temáticos en el aeropuerto de Castellón tiene, en estos momentos, un valor negativo. La gestión ha sido muy mala. Lo que podamos rescatar, desde luego, lo vamos a intentar salvar. ¿Cómo? Agitando el balance para «limpiarlo» y ver si queda algún fruto.

Dice usted que la gestión del PP fue «terriblemente negligente» y sugiere, incluso, la posibilidad de sobrecostes en las inversiones. ¿Por qué no han llevado todas esas actuaciones a la Fiscalía?

No hay evidencias que permitan tomar ese camino. Estamos hablando de negligencia en la gestión, de derroche de dinero público... Yo desconozco si eran necesarios todos los edificios que se hicieron en la Ciudad de la Luz o las rotondas de los alrededores de Terra Mítíca. Ahora mismo estamos mirando cada euro que se gestiona. Y puedo asegurar que en la etapa anterior no se hizo de esa manera.

Analicemos proyecto a proyecto. ¿En qué punto está la venta de suelo del entorno de Terra Mítica?

La decisión de sacar a subasta ese suelo está tomada y aprobada por el consejo de administración de la sociedad. Iniciamos el procedimiento con una tasación del suelo que se ha tenido que actualizar. Espero que antes del verano se pueda resolver.

¿Y con eso se va a poder acabar el Centro Cultural de Benidorm?

Otra gestión incomprensible de los gobiernos del PP que se ha comprometido a resolver el presidente de la Generalitat. No es de recibo que se ofrezca esta imagen en uno de los mejores sitios de Benidorm. Lo que iba a ser un centro cultural emblemático es el mayor punto de deterioro urbano de la ciudad. No puede ser. Se van a dedicar hasta 12,5 millones para las obras. Se le pasó el convenio al Ayuntamiento de Benidorm y estamos en fase de negociación. Hay buena voluntad. Pero estamos llegando a un punto en el que hay que tomar una decisión. O se hace o habrá que coger esos recursos económicos para poder buscarles otro destino.

Junto a Terra Mítica, la otra gran pata de inversión fue la Ciudad de la Luz. ¿Cuál es la salida a un proyecto, a día de hoy, fantasma?

Con la Ciudad de la Luz hay un doble sentimiento. Uno lo ve y es una especie de monumento al derroche. Es una ciudad espectral. La mantenemos porque allí, efectivamente, hay más de 400 millones invertidos. Pero, al mismo tiempo, uno piensa: hay que darle la vuelta a esta situación. No podemos tener improductivo un activo de esta magnitud.

Pero, sin ir más lejos, aún no se ha resuelto el expediente de la UE...

Ximo Puig se ha «mojado» para intentar resolver este asunto. Lo que no podía ser es que a Bruselas no fuera ni un responsable del Consell durante la etapa del PP y que sólo enviasen a técnicos. Esa acción del presidente es la que ha permitido, poco a poco, recuperar la confianza de Europa en la Comunitat. Desconozco la resolución final pero creo que serán sensibles y que va a ser una salida positiva para intentar relanzar el complejo.

¿Cómo?

Es un entorno muy potente. Sobre la Ciudad de la Luz tenemos que construir un proyecto que se convierta en una palanca de desarrollo económico, si la UE lo permite. En el audiovisual, si es posible. Pero allí hay otros muchos edificios que se puedan usar para otras actividades. El cine se hace hoy de otra manera. Va a quedar muchísimo espacio libre, reutilizable y que ahora está cerrado.

¿Puede ir la solución a la Ciudad de la Luz por la creación de un gran polo que esté vinculado al impulso de la nueva economía digital?

Estamos trabajando desde Proyectos Temáticos con algunos actores económicos para explorar, efectivamente, esa posibilidad...

Sólo cuatro rutas y apenas 100.000 pasajeros al año, lo mismo que un fin de semana en El Altet. Otro proyecto casi «fantasma» es el del aeropuerto de Castellón...

Queda claro que era una inversión innecesaria. No hay una respuesta del mercado al aeropuerto. Proyectos Temáticos es un accionista más y vamos a prestar toda nuestra colaboración. Es necesaria. No sólo es que no hay aviones. Es que era un proyecto que no se podía desarrollar. Con problemas urbanísticos, quebranto económico... Monstruoso. El Consell quiere intentar darle sentido a una cosa que no la tenía pero que le ha costado mucho dinero a los ciudadanos. Hay que darle actividad económica. Y no sólo estoy hablando de vuelos. Hay que seguir creciendo. Darle alguna ruta más. Pero si no puede ser con el tráfico aéreo, habrá que buscar otra línea de negocio.

¿De qué tipo?

Tendrá que ser una solución, lógicamente, que esté relacionada con el sector aeroportuario. Una zona logística, servicios alternativos, mantenimiento y arreglo de aviones, formación de pilotos, desguace de aeronaves... Hay que explorar esas opciones.

El otro gran proyecto cultural que gestiona la empresa es el auditorio de Torrevieja. 55 millones de inversión y cerrado.

Seis años cerrado. Es imperdonable. Hemos licitado una programación y vamos a abrir de inmediato las plicas. El presidente me dijo: esto no puede estar cerrado. Hemos mantenido conversaciones con el Ayuntamiento de Torrevieja, que debe recibir la obra en 2021. Pero, al final, hemos decidido intentar poner en marcha una programación cultural potente para toda la Vega Baja.

Casi 140 millones en organización de grandes eventos: Fórmula 1, náutica, tenis, golf, hípica... ¿Cuál va a ser la política de patrocinios?

El único evento que vamos a mantener es la Volvo. Tenemos un acuerdo para celebrar la de este año y una prórroga por dos ediciones más. Y vamos a seguir adelante. Pero, en principio, no habrá nada más. Temás como la Fórmula 1, por ejemplo, han generado un gasto enorme para un impacto, en mi opinión, muy escaso.

Ha surgido la posibilidad durante estos días de que Alicante tenga una edición más de la Volvo. ¿Cómo se va a abordar este asunto?

Lo que nos dicen los estudios que tenemos es que la Volvo tiene un impacto bastante grande. Ahora bien, Proyectos Temáticos va a hacer su propio estudio. Lo vamos a sacar a licitación en breve. No tenemos aún toda la información. Cuando la tenga, la pondré encima de la mesa. Hay que analizarlo bien.

Compartir el artículo

stats