El secretario general del PSPV, Ximo Puig, no acudirá como delegado al Congreso Federal que proclamará a Pedro Sánchez por segunda vez líder del PSOE. Lejos de tratarse de una afrenta, el también presidente de la Generalitat Valenciana, manifestó ayer a este diario que su decisión respondía a su voluntad de «no entorpecer» el proceso y reiteró que quería dejar patente su «respeto absoluto a los resultados». En este sentido, el líder de los socialistas valencianos garantizó su asistencia al congreso y su participación el día de la clausura con la designación de Pedro Sánchez como líder del PSOE. Lo hara, en este caso, como máximo representante de los socialistas valencianos y no como delegado con voto de la expedición. La delegación socialista valenciana es la segunda con más delegados, con 95, llamados a participar en el 39 Congreso Federal del PSOE que se celebrará en Madrid del 16 al 18 de junio.

La decisión de Puig, que fue durante la campaña uno de los principales valedores de Susana Díaz, se produjo horas después de que alguno de los apoyos de Pedro Sánchez en Castelló manifestara sus reticencias a que Puig formara parte de la expedición a Madrid. Aunque destacados miembros del partido aseguraron ayer a este periódico que se trataba de una «minoría», el jefe del Consell habría decidido no exigir ser delegado para «no dividir a los militantes» de su provincia y «evitar el enfrentamiento». Estas mismas fuentes apuntaron a la actual jefa de gabinete de la alcaldesa de Castelló, Susana Ros, como una de las voces más críticas. Ros fue diputada y coincidió con Pedro Sánchez en el congreso, aunque en esta legislatura no ha repetido. Junto a ella se posicionaban ayer también algunos destacados miembros del PSPV de la capital de La Plana.

La agrupación de Castelló, donde Sánchez recibió 282 votos frente a los 62 de Díaz y los 30 de Patxi López, no es, sin embargo, una agrupación mayoritariamente hostil al secretario general del PSPV. Una dualidad que recoge el sentir de la mayoría de militantes del PSPV: «sanchistas», pero también «ximopugistas». Algo que también sienten los más partidarios del madrileño y que ya han anunciado que no presentarán candidatura alternativa a la de Ximo Puig en el congreso autonómico que tendrá lugar previsiblemente a principios del mes de julio.

Delegados en clave valenciana

Puig ha pedido a los que sean designados hoy en los «congresillos» provinciales que participen en el cónclave socialista «con la agenda valenciana en la cabeza». Y es que, el congreso federal del PSOE, no sólo elegirá a su próximo secretario general, también votará las enmiendas a las dos ponencias marco, donde se fijarán las principales posiciones de los próximos años en temas de gran interés para los valencianos como son la financiación o las necesidades estatales en materia de infraestructuras.