? «La universidad pública valenciana y española están sufriendo un proceso de envejecimiento, descapitalización y falta de motivación que nos conduce irremisiblemente a un retroceso y a un empeoramiento de nuestros resultados», alertó ayer el Francisco Mora en la toma de posesión de su segundo y último mandato de cuatro años como rector de la Universitat Politècnica de València (UPV). Ante esta coyuntura, Mora propone «desarrollar una estrategia inteligente, un cambio que resulta inevitable» y que implica varias líneas de actuación. Entre ellas: impulsar una formación universitaria abierta, adaptativa y global; propiciar la investigación relevante y comprometida socialmente con la innovación y el progreso; avanzar en una universidad sin fronteras; desarrollar una política propia de personal y lograr un modelo de financiación plurianual por parte de la Generalitat que «nos permita planificar nuestra actuación, que proporcione una base sólida y un horizonte estable a nuestro trabajo y que permita nuestra proyección hacia el futuro». Porque, añadió, «no podemos asumir un solo esfuerzo más sin comprometer la sostenibilidad y calidad de nuestro servicio público».