Mientras los miembros del Consell se preparan para su próximo seminario; el que se celebrará en Ademuz en julio, el PPCV ha hecho recuento del gasto que ha supuesto para las arcas autonómicas los tres desplazamientos de este tipo que ha realizado el Ejecutivo en lo que lleva de mandato: 33.000 euros. Esta es la cifra que ayer divulgó el grupo parlamentario popular y a la que ha llegado echando mano de la calculadora y sumando todas las facturas que le ha facilitado Presidencia de la Generalitat sobre estos seminarios que puso en marcha el Consell para hacer balance de proyectos, presentar nuevos objetivos y avanzar en el mestizaje. El Consell estrenó este suerte de retiros de fin de semana en Morella; continuó en Torrevieja y celebró el último en Sagunto. Ahora prepara las maletas para Ademuz.

De los tres desplazamientos, el de Torrevieja, realizado hace ahora un año, ha sido el de mayor coste: 14.654 euros. El de Morella y Sagunto tuvieron un coste muy similar: 9.200 euros. Con este dinero se pagó el alojamiento de los consellers, altos cargos y personal eventual, así como las dietas en comidas y taxis. También incluye el pago por la gasolina y las idemnizaciones a los escoltas y becarios.

El presidente del grupo popular en las Corts, Jorge Bellver, cuestionó ayer lo que calificó como las «vacaciones pagadas» a los consellers al considerar que esta legislatura se ha caracterizado por la «inacción».

«Los retiros espirituales del Consell, las vacaciones pagadas a las que nos están acostumbrando, cuestan muchísimo dinero», indicó Bellver que subrayó los 27.500 kilómetros de coche oficial y el desplazamiento de 164 personas a los lugares donde se han realizado estos seminarios.

Para el PP estos seminarios carecen de sentido porque los resultados han sido «objetivos no conseguidos» o «aprobados pero eternizados en su tramitación».

El diputado ironizó sobre el próximo encuentro en el que el profesor se reúne con sus discípulos»: «Que descansen en ese retiro en una tierra magnífica, de la que van a poder disfrutar, pero que se traigan aquello de lo bueno que tiene esa tierra: su gente, su espíritu de trabajo y su sensatez», dijo.

Y pidió al Gobierno autonómico que «se deje de puestas en escena» y de «políticas estériles e híbrida que demuestran que ese mestizaje no están trayendo los frutos que anunciaron».

Así, Bellver hizo su particular balance: los ataques a la libertad, en alusión a la educación concertada, la obesidad administrativa y los enchufes; y la creación de nuevos enfrentamientos a cuenta del valenciano.