«Personal médico» en lugar de «doctores» o «descendencia» para referirse a los hijos. La Conselleria de Sanidad se ha propuesto eliminar de las consultas médicas lo que considera un lenguaje sexista, para lo que ha elaborado una guía de seis páginas con algunas «indicaciones útiles» que ha hecho llegar a sus trabajadores para que las tengan en cuenta a la hora de hablar con los pacientes o redactar comunicados y correos electrónicos.

En esta «Guía breve para un uso no sexista del lenguaje», Sanidad recoge una serie de palabras y expresiones a evitar por sus connotaciones sexistas y su equivalencia en un lenguaje más inclusivo. De esta forma, para referirse a los cargos, Sanidad tacha de «error gramatical» anteponer el artículo femenino, seguido del sustantivo masculino, por ejemplo «la médico». El departamento de Carmen Montón aconseja referirse a «la jefa de servicio» o a «la farmacéutica», por ejemplo. También propone que se evite el masculino genérico para incluir a mujeres y hombres y aconseja referirse a las «personas mayores», en lugar de «los ancianos» o «las personas enfermas» para sustituir a «los enfermos».

Sanidad también insta a sus trabajadores a que busquen frases o expresiones alternativas y pone varios ejemplos. Así, en lugar de «los pensionistas no tendrán que abonar los medicamentos», propone: «No se tendrá que abonar los medicamentos cuando se tenga la condición de pensionista».

«Criaturas» por «niños»

El departamento de Montón aconseja que la palabra «niños» sea sustituida por «infancia, criaturas o menores» o se utilice la palabra «descendencia» para hablar de los «hijos»; «alta voluntaria del paciente» por «alta voluntaria a petición propia» y «profesionales de la sanidad o de la salud» en lugar de «profesionales sanitarios».

A la hora de redactar un comunicado o un correo electrónico, la conselleria aconseja intentar personalizar siempre que sea posible y cuando se utilice la barra, intentar alternar: «Estimadas compañeras/os; Estimados amigos/as». El uso de la arroba, en fórmulas como «querid@s compañer@» queda relegado a la comunicación informal.

Desde el primer momento que tomó posesión del cargo la consellera de Sanidad, Carmen Montón, no ha ocultado que los temas de igualdad son su fuerte. No en vano, la lucha por los derechos de la mujer marcó su trayectoria política antes de desembarcar en el Gobierno de la Generalitat, siendo secretaria de Igualdad en el PSOE.

Hacer visibles a las mujeres

Según destacaron desde la Conselleria de Sanidad, esta es la primera guía que se edita específica para el personal sanitario. El objetivo es el de promover algunos cambios en el uso del lenguaje «para nombrar a las mujeres que son atendidas en los servicios sanitarios o en el entorno laboral para que se hagan visibles y contribuya a definirlas como personas con identidad propia y no supeditadas al genérico masculino». De esta manera se evita, añade Sanidad, «adjudicarles estereotipos de género sexistas que tanto daño hacen a la igualdad entre mujeres y hombres».

Desde el departamento de Filología Española de la Universidad de Alicante aplauden esta iniciativa. «El lenguaje ni es ni deja de ser sexista, lo son quienes lo utilizan. Se trata de que con el uso de la lengua tratemos de contribuir a la construcción de la igualdad», explica Carmen Marimón, profesora titular de Lengua Española de la Universidad de Alicante. Y aunque la mayor parte de los cargos ejecutivos de los hospitales están copados por hombres, «la realidad social es que en el mundo de la sanidad hay muchas mujeres y el lenguaje tiene que reflejar ese cambio social».