«La gestión de las Cercanías es un auténtico desastre». Así de contundente se manifestó el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, de Compromís, ante la cancelación de decenas de estos servicios por parte de Renfe durante esta semana por culpa de la falta de maquinistas. Y es que esta circunstancia no solo ha provocado las quejas de los usuarios, sino que también ha soliviantado a varios de los alcaldes de los municipios más afectados, como Sagunt, que además recuerdan la falta de inversiones por parte del Ministerio de Fomento en este ámbito en la Comunitat Valenciana.
«No se entiende que no haya suficientes maquinistas. La gestión es un auténtico desastre. Estaría mucho mejor en manos de la Generalitat que en manos de un ministerio que solo se acuerda de nosotros para pedirnos más impuestos», criticaba vehementemente Quico Fernández, por cuyo municipio, Sagunt, tienen parada las líneas 4 y 5 de Cercanías.
El munícipe saguntino fue un paso más allá y también lanzó sus quejas hacia otros proyectos ferroviarios como el tercer hilo: «Ya hemos sufrido bastante con las obras y retrasos de esa broma y ese fraude que nos han hecho a los valencianos con el denominado tercer hilo para que ahora tengamos más problemas».
«Yo creo que no se puede gestionar peor el sistema ferroviario cuando es tan básico para nuestra ciudad y muchas otras. De hecho, el ferrocarril es uno de los medios de transporte más usados en Sagunt, a pesar de que tiene un precio absolutamente intolerable y de que en los últimos años el servicio ha empeorado, no sólo en puntualidad, sino en frecuencia, en servicio y en precio», culminó Fernández.
Al sur de la capital, en Gandia, por donde pasa la C-1, fue la alcaldesa socialista Diana Morant quien mostraba su malestar y recordaba las dificultades que provoca las carencias en este servicio en época estival: «Elevaremos una queja formal a Renfe para exigir la recuperación de servicio de trenes de Cercanías, un medio de transporte básico para nuestros ciudadanos, más en temporada de viajes vacacionales y para una ciudad turística».
«Esperamos una rectificación en la gestión de esta empresa pública por parte del Gobierno de España para que no haya recortes en personal ni de ningún tipo que desencadene en rebajas en el servicio actual de trenes de Cercanía», añadió Morant, quien recordó que «la falta de presupuesto del ministerio ha vuelto a castigar a la Comunitat Valenciana».
«Deberían tenerlo controlado»
En esa misma línea C-1, pero en la Ribera, la alcaldesa de Sueca, Raquel Tamarit, reclamó que el problema de personal de Renfe «es algo que se debe de solucionar rápido porque afecta a muchos vecinos». En este sentido, Tamarit argumentó que «no se trata de la suspensión del servicio por una huelga, sino por falta de personal, y es algo que Renfe debería de tener controlado para evitar que sucedan estas cancelaciones».
También en la Ribera, pero en la C-2, el primer edil de Carcaixent, Paco Salom, calificó de «muy grave» que «en 20 años se haya dejado envejecer la plantilla». «No se trata de algo que llegue de repente, sino que se sabe con la suficiente antelación», insistió. No obstante, añadió que «ahora falta saber cuál ha sido la verdadera causa, si la falta de previsión o si hay alguna otra limitación».
