Las trágicas muertes de varios ciclistas en carreteras valencianas han desencadenado una serie de reacciones por parte de los gobiernos autonómico y central. Entre las medidas aplicadas para acabar con la escala de accidentes mortales contra el colectivo deportista, se encuentra el incremento de controles de alcoholemia y drogas.
En concreto, en el tramo de la carretera nacional 332 a su paso por Oliva en la que en apenas un mes murieron cuatro ciclistas arrollados por conductores que se encontraban bajo la influencia del alcohol y las drogas, se ha realizado un «sobreesfuerzo de controles».
Durante la mañana de ayer, en este mismo recorrido y en la zona de ocio nocturno de Gandia, la Guardia Civil detectó siete positivos en alcohol y tres en drogas. La Policía Local que llevó un control en el casco urbano de Oliva, detectó cuatro positivos en conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Además un helicóptero de tráfico estuvo sobrevolando la zona desde las 6:00 horas hasta las 9:00 que fue el tiempo en el que estuvieron activos los controles.
Pero el refuerzo de estos controles se están llevando a cabo en todas las vías de la Comunitat. Según datos facilitados por la Delegación de Gobierno, en una semana se realizaron un total de 12.963 pruebas de alcohol, de las que 183 arrojaron resultado positivo y 84 test de droga, de los que 38 fueron positivos, lo que representa un 45,23 %.
Con respecto al consumo de bebidas alcohólicas, en Alicante de 5.442 pruebas realizadas se produjeron 74 positivos, en Castellón de 1.832 test, 13 confirmaron el consumo de alcohol y en la provincia de València, de los 5.689 controles un total de 96 dieron positivo. Con respecto a los test de detección de consumo de drogas, de los 84 llevados a cabo en total en Alicante, València y Castelló, 34 dieron positivo. Lo que representa más de un 45 % de los conductores testeados.
Además, desde el Ministerio del Interior, han llevado a cabo la campaña «Almas Ciclistas» para concienciar sobre los accidentes de ciclistas con gran éxito.
