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Sanidad

El hospital amonestó al jefe que alertó de las pruebas sin permiso a los bebés

El responsable de Neurofisiología del Hospital de la Ribera fue apercibido tras concluir la investigación interna que él mismo motivó «Lo notifiqué cuando tuve conocimiento y se comprobó», asegura

El hospital amonestó al jefe que alertó de las pruebas sin permiso a los bebés

La investigación interna que se siguió en el Hospital de la Ribera tras conocerse que un especialista del servicio de Neurofisiología estaba realizando pruebas adicionales a bebés sin tener el consentimiento expreso de sus padres ha tenido repercusiones y no solo para el facultativo en cuestión. Según confirmaron ayer fuentes de la empresa gestora del hospital de Alzira, la UTE Ribera Salud II, esta investigación interna se cerró con la presentación de una amonestación al especialista en cuestión pero también contra su jefe, el responsable del servicio de Neurofisiología, que fue el que dio la voz de alarma a nivel interno de lo que estaba sucediendo.

La empresa confirmó ayer ambas amonestaciones pero no ofreció una explicación oficial de los motivos por los que se decidió apercibir por escrito al responsable del servicio en el que sucedieron los hechos que han motivado además una investigación de la Conselleria de Sanidad y, ahora, una por parte de la Fiscalía de Menores.

El responsable del servicio rehusó ayer hacer declaraciones a Levante-EMV sobre esta amonestación y los motivos que se le dieron desde la empresa aunque sí aseguró que él había actuado en todo momento «como jefe de servicio y según los procedimientos internos» marcados por Ribera Salud para la gestión hospitalaria. En este sentido defendió que él notificó lo que estaba sucediendo en su servicio «una vez tuve conocimiento y en cuanto se comprobó».

Fue él de hecho el que, tras ser alertado por personal del hospital, decidió denunciar ante la dirección médica la realización de estas pruebas adicionales a bebés mientras estaban sedados por parte de uno de los especialistas de su servicio.

Los lactantes habían sido derivados desde Pediatría para someterse a un estudio de potenciales evocados y confirmar si tenían algún déficit auditivo pero mientras estaban dormidos el facultativo amonestado les hizo también una prueba adicional: la estimulación del nervio frénico, responsable del movimiento del diafragma. Hay 18 casos conocidos.

Desde la empresa aseguran que esta prueba -«inocua e inofensiva», según defienden- se hizo solo en los 18 casos denunciados por la Conselleria de Sanidad y «de buena fe» por parte de este facultativo con el ánimo de «descartar patologías nerviosas que pudieran estar asociadas a la prueba auditiva de origen y tener un diagnóstico más preciso».

Órgano de garantía interno

Tras hablar con los gestores del hospital, el jefe de servicio lo notificó al Compliance, un órgano interno de Ribera Salud que, al estilo de las multinacionales americanas (la empresa está participada por la americana Centene) se erige como garante del buen funcionamiento interno de la empresa y vela por las buenas prácticas.

Este organismo llevó a cabo una investigación al respecto. Según Ribera Salud, la conclusión de esta investigación interna («abierta por la dirección del centro al tener conocer de los hechos», según la empresa) es que hubo un «fallo administrativo» ya que el consentimiento informado que dieron los padres para la sedación no incluía la realización del segundo estudio.

Pese a ello, el especialista consideró que, con la autorización para la primera prueba «cumplía con los trámites administrativos» por una «errónea interpretación administrativa».

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