«La meua xiqueta es l´ama del corral i del carrer, de la figuera i la parra, de la flor del taronger». Con estas palabras concluyó ayer Mónica Oltra el ciclo sobre el cambio climático, apelando a «esa cultura popular que a veces dice de manera sencilla lo que los científicos quieren explicar», esto es, que hay que cuidar la tierra en la que vivimos.

La vicepresidenta de la Generalitat incidió, como había hecho anteriormente alguno de los alcaldes presentes en la mesa de debate, en que las grandes medidas contra el cambio climático se deben tomar en instancias más elevadas, como la estatal o la comunitaria. «Sin embargo, se demuestra que desde lo municipal también se puede avanzar mucho», añadió la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas. En este sentido, reclamó que los 5 millones de euros anuales que el Estado recauda por el exceso de emisiones de CO2 en la Comunitat Valenciana reviertan las arcas valencianas para poder destinarse a políticas de adaptación al control de esas emisiones, bosques, o zonas turísticas cercanas al mar.

La también portavoz del Gobierno valenciano destacó que la lucha contra el calentamiento global pasa por superar retos como el del aumento de las desigualdades. «Muchos de los desplazamientos y movimientos migratorios forzados son a causa del cambio climático. No es algo que vaya a ocurrir en el futuro, ya está pasando», alertó la consellera. En este sentido, destacó Oltra medidas del Consell como el Pativel (reordenación del uso de suelo del litoral) o el plan de residuos.