Como cada año cuando llega el verano, la Conselleria de Sanidad (sea del color que sea), «reorganiza» los recursos disponibles «en función de la afluencia de pacientes». Más en la costa, menos en las grandes urbes. Esta reorganización conllevará este año el cierre de 3.117 camas desde julio a septiembre, según informó la conselleria que dirige Carmen Montón.

En concreto, se trata de la clausura de 808 puestos en julio, 1.352 en agosto y 957 en septiembre, lo que implica el 32 % del total de camas disponibles de esos meses, esto es, 9.624. «Con el plan garantizamos la mejor asistencia en los meses de verano tanto en las zonas urbanas con en los destinos turísticos, donde aumenta la presión asistencial en nuestro sistema sanitario», destacó Montón en la presentación del Plan Asistencial de Verano 2017.

Sin embargo, CSI·F advirtió de que este cierre supondrá «una pérdida de la calidad asistencial, saturará el servicio en algunos centros y provocará un aumento de las listas de espera». La central sindical detalló que, en algunos casos, como en el de los hospitales Doctor Peset, Sagunt, Manises y General en la provincia de València, el General de Alicante o los de La Plana y La Magdalena en Castelló, el cierre afectará, en agosto, a más del 20 % de camas existentes.

Con todo, desde la conselleria apuntan a que este año se han cerrado 61 camas menos que el ejercicio anterior. «La cobertura de camas hospitalarias activas en el mes de julio será de 91,6 %, en agosto la cobertura será del 85,9 % y en septiembre del 90 %», detallaron, aunque en el conjunto suman ese 32 % de camas cerradas en el total del trimestre veraniego.

Además, según la central sindical, la conselleria «se ha limitado a remitir la información cuando los sindicatos le han urgido a hacerlo», y señaló que «este cierre de camas impedirá la actividad normal y puede derivar en una saturación de los servicios de urgencia, además de retrasar intervenciones en quirófanos». No obstante, desde Sanidad detallan que el programa contempla la contratación de 381 profesionales. Por provincias, 98 profesionales reforzarán la atención en Alicante, 127 en Castelló y 156 en Valencia.

En Alicante, estos recortes se producen en unos meses en los que se multiplica su población con la llegada de miles de turistas y que se mantienen invariables pese a que el PSPV, que en su momento criticaba esta medida, dirige ahora la Conselleria de Sanidad.

Las gerencias de los distintos departamentos justifican los cierres de camas en la caída de la actividad asistencial y en la necesidad de acometer reformas en las plantas. Los sindicatos, por su parte, critican que de esta manera Sanidad se ahorra dinero en sustituir a los médicos y enfermeros que se marchan de vacaciones y alertan de que aumentarán las listas de espera a partir de septiembre.

Quirófanos

El centro sanitario que más camas dejará sin utilizar este verano es el Hospital General de Alicante, el más grande de la provincia. En total serán, 129 en julio y septiembre y 149 en agosto. Digestivo, Neonatología, Traumatología o Cirugía son algunos de los servicios que perderán camas. A ellos se suman 30 camas de la séptima planta que cerró hace unos años en plena ola de recortes y que se mantiene cerrada, salvo en casos en los que la presión asistencial es muy grande.

Desde UGT en el centro sanitario alertan de que se cerrarán plantas quirúrgicas, mientras que los quirófanos siguen abiertos, «por lo que estas plantas van a ir muy sobrecargadas de trabajo», señala Rosa Queijas. Por su parte, desde CC OO valoran que este año se ha aumentado el presupuesto en realizar sustituciones, pero a su juicio sigue siendo insuficiente.