Una vez controlado el incendio que arrasó casi 1.300 hectáreas entre los términos municipales de Gátova, Segorbe y Altura, el equipo de gobierno de la capital palantina trabaja desde ayer con el fin de sentar las bases de cara a los trabajos pertinentes que conllevan este tipo de situaciones. El alcalde, Rafael Magdalena, «a primera hora de la mañana» contactó con la Conselleria de Medio Ambiente para ver «cómo actuar» tras el fuego, ya controlado.

El término municipal de Segorbe ha sido el que mayor afección ha sufrido en este desolador incendio, con más del 80% de su terreno afectado, es decir, 975 hectáreas calcinadas. De éstas, alrededor de 800 son masa forestal y unas 175 hectáreas serían de cultivo, principalmente olivo, almendro y algún algarrobo, aunque muchos abandonados.

En este sentido, apuntó Magdalena, «estamos en contacto con la administración autonómica para que nos expliquen qué tipo de ayudas hay, cómo gestionarlas y facilitar a los vecinos afectados las tramitaciones». Una vez se sepa, el ayuntamiento pondrá una persona encargada que trabajará, tanto para ayuda al trámite como para dar información por las dudas de los vecinos.

Para Magdalena «es fundamental pedir actuaciones y celeridad a las administraciones, que no dejemos esto pasar y comencemos cuanto antes a hacer las cosas». Por eso pedirá que Segorbe acoja «con la máxima celeridad» la mesa post-incendio y el consistorio ya cuenta con los mapas cartográficos para delimitar los terrenos afectados.

Por su parte, el presidente Ximo Puig afirmó ayer que se iban a intensificar las labores de prevención, que intentan «priorizar, y destacó la «buena coordinación» entre instituciones y dirección técnica para sofocar este incendio, «muy difícil de combatir» por la orografía y las condiciones climatológicas, apuntó ayer. «Habido un trabajo enorme por parte de más de 300-400 operativos permanentemente, personas que han dado la cara y a los que hay que agradecer profundamente este trabajo», declaró Puig.