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Recursos hídricos

El Júcar terminará el verano con los embalses exhaustos por la sequía

El Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente prevé la activación de los pozos de sequía a partir de septiembre si sigue sin llover - En Alarcón quedan 393 hectómetros cúbicos, 200 menos que en 2016

El Júcar terminará el verano con los embalses exhaustos por la sequía

La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, manifestó ayer en València que no se plantea «medidas adicionales» para hacer frente a la sequía tras la prórroga del decreto especial aprobado en 2015 al inicio de la crítica situación que puede hacerse insostenible al final del verano cuando obligaría a la apertura de los pozos de sequía.

Fuentes de la Confederación Hidrográfica del Júcar que ayer acompañaban a la ministra en su visita a las obras de modernización de la Acequia Real del Júcar y a la Comunidad de Regantes de Sueca, aseguraron que los embalses disponen del «agua justa» para llegar a primeros de septiembre y que, a partir de ese momento, aunque la demanda disminuye, sería necesario «cortar el grifo» de los pantanos y recurrir a la puesta en marcha de los pozos perforados paulatinamente desde la sequía de 1994 en las planas costeras de la Comunitat Valenciana.

Isabel García Tejerina recordó que en esta situación «cada gota cuenta» y, aunque este verano no se plantean restricciones, emplazó a las confederaciones hidrográficas y a las comunidades de regantes a tener muy presente la necesidad de hacer «una gestión responsable, muy cuidadosa» y esperar a que la lluvia «reponga los niveles de los embalses».

Por el momento, la ministra anunció ayer la prórroga del decreto de sequía. La ausencia de precipitaciones en la zona de generación de recursos de los sistemas más dependientes de las aguas superficiales (Júcar y Túria) ha hecho que los indicadores de estado representativos de las cabeceras de ambos sistemas presenten «valores de alerta y emergencia», según el criteiro del ministerio.

El informe mensual de seguimiento de indicadores de sequía del Plan Especial de actuación en situaciones de alerta y eventual sequía de la CHJ, correspondiente a mayo de 2017, sitúa a los sistemas de explotación Júcar y Túria en escenarios de prealerta y alerta respectivamente.

El ministerio cree que el comienzo de la campaña estival, con importantes demandas tanto urbanas como agrícolas, que son atendidas desde los embalses de estos sistemas, «hace prever un empeoramiento de los indicadores, y una disminución significativa de los recursos embalsados».

En el sur de la Comunitat Valenciana, integrado en la cuenca del Segura, la situación es si cabe más desesperada, aunque el ministerio ha optado por movilizar las desaladoras, por lo que no se esperan problemas para el abastecimiento de poblaciones aunque sí algunos recortes en el regadío del trasvase Tajo-Segura, cuyos usuarios están planteando una cesión de caudales del Júcar.

Sin embargo, el embalse de Alarcón se encontraba ya al 35,15% de su capacidad con 393 hectómetros cúbicos, muy cerca ya de su curva de reserva, que se sitúa entre 334 y 263 hm3 en función del mes y que obliga a compensar económicamente a los usuarios del Júcar si se baja de estas cifras. El año pasado en estas mismas fechas, el volumen almacenado en Alarcón de 590,64 hm3 que representaban el 52,83 %.

Mientras tanto, Contreras ha pasado de disponer de un 19,8 % de su capacidad en la primera semana de julio de 2016 a almacenar un 15,89 % en la actual que corresponden a 135 hectómetros cúbicos. La Confederación Hidrográfica del Júcar considera que por razones de seguridad y medio ambientales no puede llevar el nivel del embalse por debajo de 100 hectómetros.

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