El tripartito que sostiene en las Corts la mayoría de izquierda que dirige el Consell se ha visto forzado a dar un paso atrás. PSPV, Compromís y Podemos tuvieron que poner ayer freno a dos leyes de calado político por falta de apoyos en un caso y por las discrepancias existentes entre socios en otro.

Ocurrió en el pleno de las Corts y por partida doble. Primero con la reforma de la ley de la Sindicatura de Comptes, que lleva ya 17 meses y tres días en tramitación, y que se queda atascada porque a la hora de la verdad le han faltado los apoyos necesarios.

Y después con la ley de Delimitación Comarcal que impulsa Compromís y que deberá esperar un mejor momento para que el pleno apruebe su toma en consideración, porque ni en la propia coalición que lidera Mónica Oltra, y menos en el PSPV, quieren avivar el incendio desatado en varias comarcas, como la de l´Horta, desde que Levante-EMV publicó los detalles de la norma, que tiene el criterio favorable del Consell.

Pero más allá de las leyes bloqueadas, de lo ocurrido ayer en la Cámara se desprende una conclusión clara y es que tras dos años de legislatura, la situación política valenciana ha dado un vuelco.

De un lado, la ruptura en el grupo de Ciudadanos, que hasta ahora era una extension más del tripartito con el apoyo a cuestiones cruciales (como la ley de la nueva RTVV) y de otro las diferencias que afloran, y cada vez son más difíciles de ocultar en el tripartito, hacen que el guión de lo que va a ocurrir en las sesiones de les Corts, no esté escrito de antemano.

A la espera de Ciudadanos

Podemos confiaba en sacar en el pleno de ayer su reforma de la Sindicatura de Comptes con el apoyo de los nueve diputados de Ciudadanos. De hecho estaba dipuesto a asumir las enmiendas que plantea esta formación.

El partido que aún lidera en la cámara Antonio Montiel (aunque el jefe del partido es Antonio Estañ) estaba convencido hace unos días de que la formación naranja le permitiría alcanzar el mínimo de 60 votos necesarios (los tres quintos de la cámara) ya que no es suficiente con los 59 del tripartito (PSPV, Compromís y Podemos) más los cuatro no adscritos que abandonaron hace dos semanas Ciudadanos.

Pero Podemos y Ciudadanos forman una pareja que se repele y no es de extrañar que el partido centrista evitara ayer apoyar la ley con el pretexto de que necesitan más tiempo tras su crisis interna para decidir qué hacer con la Sindicatura de Comptes, por lo que, de momento, y hasta que la dirección de Madrid dé la orden, posponen su decisión.

La propuesta se retira al menos hasta el primer pleno ordinario de septiembre (el 28 y 29 previsiblemente), lo que supone un revés para Podemos que ya quería que esta norma hubiera estado en vigor el pasado verano para el nombramiento del Síndic de Comptes, Vicent Cucarella, que va a cumplir un año en el cargo.

Además, el dictamen que ha llegado a pleno ha sufrido numerosos cambios en el trámite parlamentario y se parece ya poco a la propuesta que Podemos presentó en febrero de 2016.

Mientras, también decae la Ley de Delimitación de las Comarcas que impulsaba el diputado de Compromís Paco Garcia Latorre.Oficialmente, según el diputado, se retira para facilitar un proceso de participación más amplio en el que tengan cabida ayuntamientos, pero a nadie escapa que la polémica generada en varias comarcas ha sido decisiva para que la formación diera un paso atrás.

De hecho, fuentes consultadas en el PSPV admiten que no resulta adecuado generar una polémica con la delimitación comarcal cuando la ley lleva 35 años en el cajón y desempolvarla solo generaría conflicto, a cambio de tener delimitadas las comarcas, algo que ya es de uso habitual, por lo que entienden que es preferible esperar a que se suavicen las posturas para retomarla.

El diputado Paco Garcia niega que el aplazamiento se deba a la falta de acuerdo y asegura que lo hacen porque llega el periodo vacacional y no es el mejor momento porque muchos consistorios que tienen intención de participar en el proceso no celebrarán plenos hasta la vuelta de vacaciones. García adelanta que en septiembre volverá a debatirse su entrada en las Corts y recuerda que tiene el criterio favorable del Consell.