La comisión mixta entre la Administración y la empresa que gestiona Ribera Salud no pudo realizarse ayer, tal y como estaba previsto. La contrata tenía interés en que en la orden del día de esta sesión de control se incluyera la aprobación de las liquidaciones para el cierre de ejercicio pendiente. La Administración no vio oportuno tratar el asunto al considerar que «no es competencia de la comisión mixta», lo que provocó que los gestores del hospital se levantaran y abandonaran la reunión, según fuentes consultadas por Levante-EMV.

Sobre este asunto, la Sindicatura de Comptes apunta en su informe de la gestión del hospital de Manises que una comisión mixta «no puede atribuirse competencias propias del órgano de contratación». Asimismo, el informe provisional de la viceintervención del Hospital de Dénia,también refleja que la comisión mixta de seguimiento «no tiene competencia alguna para alterar las condiciones económicas del contrato ni, mucho menos, para modificar el mismo, careciendo de competencia para aprobar, ni siquiera proponer, las liquidaciones anuales del precio del contrato».

Ahora, la conselleria analiza qué medidas adoptar ante lo que consideran un impedimento a su deber de ejercer el control del funcionamiento del servicio, como consta en los contratos. En la reunión de ayer, quedó sin abordar el refuerzo del plan estival del hospital.