La custodia compartida es uno de los asuntos que divide a los socios del Consell. La vicepresidenta del Ejecutivo, Mónica Oltra, es partidaria de que la custodia compartida sea la fórmula preferente, un sistema que entró en vigor durante un tiempo en la C. Valenciana a través de la ley foral, pero que fue tumbada por el Tribunal Constitucional. Aquella ley impulsada por el PP tuvo apoyo de Compromís.
A nivel estatal, el Gobierno prepara una ley similar. Sin embargo, a diferencia de lo ocurrido en las Corts, los diputados nacionales de Compromís se abstuvieron en una moción que recientemente impulsó Ciudadanos a favor de la regulación de la compartida impuesta.
En el escrito que Ximo Puig recogio en persona en el patio de las Corts después de la celebración de la sesión de control, los colectivos feministas ofrecen argumentos en contra de otorgar la custodia compartida cuando existe desacuerdo entre los progenitores.
Entienden que esta fórmula sólo es válida si es de mutuo acuerdo, sin ruptura traumática y cuando ambos progenitores se han implicado por igual en la educación. Las promotoras han recogido más dos 2.000 firmas de puño y letra y continuan la recogida en Change.org.
La petición no deja de ser una patata caliente para el jefe del Consell ya que su implicación lo enfrentaría con Oltra, quien tiene una postura muy diferente al colectivo feminista en buena medida vinculado al PSPV. La foto de ayer de la entrega en el patio de las Corts es una muestra de la división que genera el asunto, pero un éxito para el colectivo de mujeres por la presencia del presidente.
Así, Compromís prefirió borrarse de una imagen en la que sí estuvieron Podemos y PSPV. El asunto, es cierto, lo ha coordinado la vicepresidenta de la Mesa, la socialista Carmen Martínez, pero resultó llamativa la ausencia de Enric Morera.
