Investigadores del Instituto de Investigación Sanitaria (IISLAFE) del Hospital Universitario La Fe de València, publican esta semana en la revista Journal of Heart and Lung Transplantation", primera revista internacional del área de trasplantes, un artículo que demuestra cómo puede detectarse el rechazo, de manera no invasiva, tras el trasplante de corazón.

En el estudio dirigido por la Dra. Esther Roselló-Lletí, se analizaron 127 muestras de suero de pacientes trasplantados, que durante las semanas o meses siguientes mostraron diferentes grados de rechazo al nuevo corazón. El análisis demuestra que la proteína SERCA2a aumenta sus niveles con relación al grado de rechazo. Además, mediante microscopia confocal se analizaron biopsias cardiacas de estos mismos pacientes, demostrando que la misma molécula SERCA2a, presentaba alteraciones en tejido cardiaco similares a las encontradas en suero. SERCA2a se localiza en el retículo sarcoplásmico, una estructura subcelular que contienen los cardiomiocitos. La misión de esta proteína, conocida también como ATPasa, es transferir iones de calcio desde el citoplasma celular al interior de retículo sarcoplásmico, mediante la hidrólisis de ATP durante la relajación muscular.

La Dra. Esther Roselló-Lletí, científica del IISLAFE, y recientemente premio Talento Joven Bankia-Levante-EMV 2016, es la investigadora principal del proyecto nacional "Seguimiento de pacientes sometidos a trasplante cardiaco. Estudio de marcadores de rechazo implicados en el transporte núcleo citoplásmico", financiado por el Instituto de Salud Carlos III.

La detección del rechazo cardiaco en estos pacientes representa hoy en día, un gran reto. Las alternativas propuestas en diferentes estudios, hasta la fecha, no han servido para sustituir la necesidad de realizar una biopsia cardíaca, que implican riesgo para los pacientes fundamentalmente por su carácter invasivo.

Con los resultados obtenidos por investigadores del grupo de Disfunción Miocárdica y Trasplante Cardíaco del IISLAFE, se propone a la comunidad científica internacional un nuevo procedimiento simple, económico y sin riesgo alguno para los pacientes, que facilitará el diagnóstico precoz de rechazo cardiaco y podrá anticipar un tratamiento que evite el rechazo.