La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, afirmó ayer que el Partido Popular de la Comunitat Valenciana (PPCV) ha adoptado un papel «radicalizado y extremista» y se dedica a «agitar la bandera del odio» en áreas como la política educativa, aunque, a su juicio, ese mensaje no les permitirá recuperar votos. Oltra indicó durante «Los Desayunos de EFE en el Colegio de Abogados de Valencia» que es «una irresponsabilidad» generar enfrentamientos y utilizar el valenciano «como arma política», y ha considerado que esas «llamadas al odio» del PP se generan porque no pueden criticar la gestión.

«Nosotros en ese juego no vamos a entrar», aseveró la vicepresidenta, quien considera que la sociedad ha madurado y difícilmente se le engaña con esos mensajes «de odio y odiosos, de una radicalidad y una mezquindad inusitados, impropios de un partido democrático» y que cumple las reglas del juego institucionales.

La vicepresidenta reivindicó además que la vida interna de los partidos que sustentan al Consell no afecta a la gestión de Ejecutivo, y resaltó que el Pacto del Botánico está «a prueba de bombas internas, externas y universales», y mientras se siga cumpliendo «el qué», el pacto y «el quién» estarán a prueba de bombas.

Cómodos en el Consell

«Nos sentimos cómodos absolutamente», explicó Oltra, quien indicó que «la adversidad une», y cuando entraron al Gobierno «todo» lo que encontraron «era adversidad», al tiempo que entiende que están demostrando que el equipo humano está «muy cohesionado» y que todos están «cómodos».

Respecto a las primarias del PSPV-PSOE a la Secretaría General, defiende que el hecho de que el president de la Generalitat, Ximo Puig, sea o no secretario general de los socialistas valencianos «no tiene ninguna influencia» en el Consell, pues Compromís a quien sostiene es al president y eso es «incuestionable».

Oltra indicó que tampoco afecta al pacto el hecho de que Podemos haya cambiado de secretario general en la Comunitat, pues «es normal que los partidos políticos cambien a sus dirigentes» y eso evidencia que «hay dinamismo», y destacó que el nuevo dirigente, Antonio Estañ, es «un gran parlamentario» y un hombre «muy solvente».