En Benissa, una de las localidades de la Marina Alta por las que pasaría el tren de la costa, el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, achacó ayer a «las diferentes opiniones entre los distintos departamentos de la Generalitat» el retraso que acumula la conexión ferroviaria que debería unir Valencia y Alicante por la Costa, a través de la Marina Alta.

El ministro respondió así de forma escueta a una pregunta de Levante-EMV sobre esta infraestructura prioritaria para el norte de la provincia de Alicante y el sur de la de Valencia. De la Serna señaló que la idea del ministerio que dirige es «darle un impulso determinante al procedimiento administrativo». De hecho aseguró que quiere avanzar con la tramitación administrativa, los estudios y trámites ambientales, y empezar «con la redacción de proyectos constructivos en al menos algunas de las partes». Sin embargo, el ministerio publicó hace justo ahora un año el estudio informativo sobre el tren de la costa en el que asegura que ni social ni económicamente está justificada la construcción de esta infraestructura. De la Serna acudió a Benissa junto a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saenz de Santamaría para el acto de reinicio de las obras de la variante de la localidad por la que pasan más de 12.000 vehículos diarios. Las obras de la esperada circunvalación estaban paralizadas desde 2009, cuando la anterior adjudicataria, Begar Construcciones y Contratas SL entró en concurso de acreedores. Ahora será la empresa OHL la responsable de su construcción, valorada en 21,8 millones de euros y un plazo de ejecución de 32 meses.

La vicepresidenta en su discurso no se refirió al tren de la costa pero si al otro gran proyecto ferroviario reclamado por los empresarios y el Consell: el corredor mediterráneo. De hecho aseguró que de 2012 a 2016 han invertido más de 6.300 millones y anunció que pretenden que tenga «año a año los recursos necesarios para llevarlo a cabo». Saenz de Santamaría afirma que las inversiones de Fomento en la Comunitat Valenciana en carreteras ascienden en 2017 a 121 millones de euros, 30 son en Alicante (21 para Benissa) y «se han puesto en marcha infinidad de obras -que no detalló- que alcanzan los 392 millones de euros». Asimismo anunció que en agosto el Gobierno central licitará los nuevos accesos al aeropuerto de l'Altet en Elx.

Impiden hablar al alcalde

La polémica de la jornada estuvo protagonizada por el alcalde de Benissa, Abel Cardona, a quien impidieron intervenir durante el acto, por motivos protocolarios. Cardona criticó el acto al que tildó de «no-acontecimiento. Se busca venir a hacerse la foto, mientras solo dejan hablar a la vicepresidenta y no ha intervenido ni siquiera el ministro de Fomento o el alcalde del municipio donde se realizarán las obras», lamentó. El regidor también anunció que «no celebraremos nada relacionado con la variante hasta que no se nos entregue la notificación del final de las obras. Necesitamos hechos, no palabras, y más después de sufrir retrasos continuos tras el parón de la anterior empresa concesionaria, motivada entre otros casos por sus vínculos con la trama Gürtel».

El alcalde de Benissa también aprovechó la presencia del ministro para reivindicar mejores infraestructuras para la Marina. «No tenemos tren, dependemos del vehículo privado para casi todo, ir al hospital, a estudiar, y son deficiencias que sufren las personas más mayores y los jóvenes», asegura Cardona que reivindicó ante De la Serna. Al tiempo que recordaba que «el transporte más ágil que tenemos es la AP-7, de pago, y quedan por construir las variantes de Altea, Gata de Gorgos y la de Oliva».