Un proyecto europeo en el que participa la Policía Local de València pretende desarrollar un software específico para cámaras de vigilancia situadas en espacios rurales o zonas aisladas capaz de discernir si existe algo «sospechoso» en el comportamiento de las personas o vehículos que tiene bajo su radio de acción y, en ese caso, realizar grabaciones que tengan validez judicial. Una cámara de este tipo ya ha sido instalada en fase de pruebas en l'Albufera.

El programa «Forensor» debe servir para escanear una escena y diferenciar lo que ve. Si su sensor detecta algo sospechoso o criminal, despierta la cámara y una serie de algoritmos prefijados entran en acción para procesar lo que está sucediendo.

Las nuevas cámaras se mantendrían en modo de baja potencia cuando se enfrentaran a las olas o los árboles que se balancean con el viento, pero entrarían en acción si en su ámbito de cobertura se estuviera fraguando un escenario criminal. Las capturas de pantalla y el video se envían a las comisarías locales para que puedan profundizar en la investigación.

Según el investigador Nicolás Vretos, informático en el centro de investigación Certh (Grecia) y gerente de calidad en Forensor es el oficial de policía, a la vista de estas grabaciones, «quien juzgará si lo que se detecta es de interés o no».

Estas cámaras miniaturizadas están siendo desarrolladas por el proyecto financiado por la UE «Forensor». Pueden sobrevivir con una décima parte de la potencia de una cámara de vigilancia normal y son fácilmente ocultables, lo que significa que pueden operar a bajo costo en áreas aisladas con pocas infraestructuras.

El objetivo final del proyecto, según sus promotores, consiste en desarrollar un prototipo que pueda ser utilizado por las fuerzas policiales de toda Europa.

También en l'Albufera

El consorcio «Forensor» está formado por once socios procedentes de siete países europeos (Bélgica, Francia, Grecia, Israel, Italia, Portugal y España), que aporta como socio a la Policía Local de València, cuyo interés es instalar cámaras en el parque natural de l'Albufera. El ayuntamiento valenciano aporta a este proyecto un presupuesto de 57.750 euros.

Según Anaïs Menguzzato, concejala de Policía Local y Bomberos de València, el ayuntamiento se sumó al proyecto para «intentar detectar, prevenir y combatir las conductas delictivas en las zonas más vulnerables de València, debido a sus características geográficas, arquitectónicas o estructurales, como la falta de suministro eléctrico, poca luminosidad, etc...».

El programa permite también «identificar los vehículos conducidos por personas bajo la influencia del alcohol o las drogas», según fuentes del proyecto europeo.

Por el momento, el dispositivo colocado en l'Albufera está en fase de prueba, «comprobando sobre un campo real las funcionalidades de este sensor» matiza Anaïs Menguzzato.

Por otra parte, la policía de Cuisi, en Italia, copartícipe en el proyecto, espera que los sensores de la cámara sean capaces de avisarles «si alguien está subiendo una valla, entrando a las casas a través de una ventana o merodeando en un vecindario», según explican fuentes del proyecto.

La armada griega también ha expresado ya su interés debido a la capacidad de estos dispositivos inteligentes de vigilar mejor las islas remotas y deshabitadas y alertar a las autoridades sobre las actividades de los contrabandistas.

Pruebas judiciales

Según los responsables del proyecto, una parte crucial de Forensor es garantizar que la evidencia reunida por las cámaras sea aceptada por un tribunal, lo que significa asegurarse de que «nadie debe ver las imágenes que no corresponden» y seguir «protocolos» estrictos para comprobar que las imágenes están documentadas correctamente para apoyar una investigación. «Hay incluso una manera estándar para que la cámara obtenga la información para que esta sea admisible en el juzgado», dijo Vretos.

Sobre una posible vulneración de la privacidad, la concejala Anäis Menguzzato destacó que no existe «una filmación sistemática de imágenes, con lo cual no se vulneraría ningún derecho. Se trata precisamente de eso, de que los algoritmos que incorpora el sensor se activen solo cuando detectan situaciones delictivas».