Sindicatos y empresarios buscan reunir el máximo número de fuerzas posibles para exigir una mejor financiación. Para ello, contaban con la efectividad simbólica de convocar la manifestación próxima al 9 d'Octubre. Una de las fechas que está sobre la mesa es el 30 de septiembre, sábado. Sin embargo, Presidencia de la Generalitat considera ahora que, a la vista de la crispación en torno a la posible consulta sobre la independencia de Cataluña, sería conveniente alejar en el tiempo la protesta valenciana de la convocatoria catalana.
Fuentes del Gobierno valenciano aseguran que preocupa que el mensaje pueda desvirtuarse al estar tan próxima la cita del procés; que la manifestación para exigir un nuevo modelo de financiación se interprete como un intento por subirse al carro de las demandas independentistas o soberanistas.
Otro factor que se tiene en cuenta es que el «ruido» que provoca el conflicto catalán impedirá que se escuche con claridad el mensaje de los valencianos. Faltan meses y el referéndum copa casi diariamente portadas de periódicos nacionales y telenoticias. Un espacio que buscan también las fuerzas que convocan la protesta por la financiación valenciana y que dificilmente obtendrán durante la resaca de la consulta catalana.
Presidencia de la Generalitat -apoya la manifestación pero no la convoca- defiende de esta manera que se retrase la protesta valenciana. La idea sería posponerla hasta unos días después del 9 d'Octubre para evitar la «contaminación» posible del referéndum, aseguran las fuentes consultadas.
