En una respuesta parlamentaria al portavoz y senador territorial de Compromís, Carles Mulet, el Gobierno admite que en los últimos meses Renfe suprimió 656 trenes de los 9.119 que tenía programados en el núcleo de Cercanías de Valencia, a lo que el senador respondió tildando de «desastrosa» y «muy penosa» la situación provocada por las cancelaciones y falta de personal en los trenes.

El senador critica la respuesta del Gobierno, que «sigue la tónica habitual de confusión, pues no concreta el período, ocultan y adolecen de información esencial, por o que la coalición ha expresado su disconformidad en la respuesta.

Agentes 'no aptos'

«Sorprende en la respuesta», afirma Mulet, el grado de agentes que han sido considerados como no aptos por cuestiones psicofísicas «A todas luces parece que la edad avanzada de muchos agentes es fruto de los recortes del PP, de la falta de relevo e ingreso de nuevos agentes que debería haberse iniciado hace cinco años, con lo que se ha deteriorado un servicio de forma irresponsable y con una evidente falta de previsión e improvisación por parte de los responsables», censura. La coalición reclamaba conocer la disminución en el número de maquinistas en los últimos cinco años y las causas de los problemas en los trenes de Cercanías que están afectando «a tantos usuarios».

Piden que se dignifique el servicio, «se formen y contraten maquinistas y se ofrezcan mejores frecuencias allá por donde pasan las vías como alternativa al transporte por carretera».

Según la respuesta ofrecida por el Gobierno las incidencias se produjeron por bajas laborales, por enfermedad, y debido a la situación de trabajadores que no cumplían con las especificaciones del nuevo Reglamento de Circulación, ya que 17 trabajadores han sido declarados no aptos por los servicios médicos, 12 se encuentran de baja por enfermedad común y 3 liberados por funciones sindicales.