Uno de cada tres pescados que se consume en España está infectado con anisakis, según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). En la zona del Cantábrico, esta cifra se eleva al 50 % mientras que las especies del Mediterráneo apenas alcanzan el 6%. España figura a la cabeza de los países europeos en casos de infección por este parásito, que se encuentra en ciertos productos de la pesca y cuyas larvas pasan activas al aparato digestivo humano al ingerir pescado crudo o poco cocinado. Según una nota emitida ayer por el Grupo Vithas-Nisa, el hábito de comer boquerones en vinagre estaría detrás de buena parte de estos problemas, así como comer sardinas asadas si la pieza no llega en su interior a los 60 º. Al entrar en contacto con el parásito puede haber una infección gastrointestinal (con dolor de estómago, vómitos, náuseas, diarrea...) o alergia, según Victoria López, alergóloga del Hospital Vithas Nisa Virgen del Consuelo. La solución pasa por congelar a menos de -20 º C cinco días.