La industria audiovisual valenciana (parte de ella, claro) ya tiene un trago de agua con el que paliar la sequía de los últimos años. La nueva televisión autonómica (digamos Àpunt) ha aprobado contratos (y firmado muchos de ellos) por valor de casi 12 millones de euros durante julio y agosto para realizar las primeras producciones para el nuevo ente. Se espera que las productoras se pongan en marcha ya en septiembre y que casi la totalidad de estos trabajos estén entregados como máximo dentro de un año.

Se trata, en concreto, de tres miniseries de ficción, tres sitcoms, tres series, 18 documentales y diversos proyectos de animación. El consejo rector de la Corporació Valenciana de Mitjans ha respetado la selección que realizó el Alto Consejo Consultivo de Radiofusión. No es extraño, porque casi todos los miembros de este último órgano (la excepción fue la designada por el PP) pasaron a formar parte del primero cuando se constituyó.

Tal como se ha ido publicando, las miniseries financiadas son la esperada y anunciada sobre Jaume I, Parany (de la factoría de Rodolf Sirera) y Acció (de Joan Alamar y los creadores de Cabanyal Zeta). La Tramuntana, La forastera y Desenterrats son las series elegidas, mientras que Els diumenges, paella y Noves històries medievals (de Xavi Castillo) son algunas de las sitcom contratadas.

Con la firma de los contratos finaliza el trabajo de Isabel Carrasco, la experta de Madrid fichada para la negociación con las productoras. Quedan pendientes las coproducciones con otras televisiones, más complejas.

La nueva televisión continúa, por otra parte, con los preliminares para su puesta en marcha. La presentación en sociedad de la marca, como se dijo, será el 12 de septiembre en el Botànic. Para calentar el ambiente, el ente renovó ayer su carta de ajuste. «Som À Punt Mèdia. Estem treballant per fer realitat l'espai públic valencià de comunicació», se puede leer sobre fondo azul. Fuentes de la sociedad precisaron que no se puede inferir que esta vaya a ser la denominación oficial.