Los investigadores del Grupo de Investigación en Psiquiatría y Enfermedades Neurodegenerativas del Instituto de Investigación Sanitario del hospital Clínico de València (Incliva) y de la Universitat de València han mostrado la capacidad de cambio de la estructura y conectividad de las interneuronas en el cerebro adulto, el puente de comunicación entre neuronas.

Estos resultados son «especialmente interesantes» ya que las alteraciones de estos receptores y las interneuronas se han encontrado en distintas enfermedades psiquiátricas como la esquizofrenia. Por ello, el hallazgo abre las puertas al desarrollo de posibles vías terapéuticas frente a este tipo de enfermedades.

Los resultados de esta investigación, liderada por el profesor Juan Nácher Roselló, titular del Departamento de Biología Celular, Biología Funcional y Antropología Física de la UV, fueron publicados en la revista internacional 'Frontiers in Cellular Neuroscience' del pasado mes de junio.

Según explicó el doctor Nácher, «aunque tradicionalmente se ha tenido una visión estática sobre el cerebro adulto, desde hace décadas ya sabemos que las neuronas son capaces de modificar su estructura y sus conexiones para adaptarse a un medio cambiante y realizar funciones cognitivas, como el aprendizaje o la memoria». Asimismo, el doctor Nácher destacó que las conexiones entre neuronas «se realizan en gran medida a través de unas estructuras denominadas espinas dendríticas. Estas espinas y las conexiones que median aparecen y desaparecen en función de la actividad neuronal, influida por distintos eventos como el estrés y otras experiencias adversas».

«El objetivo de la investigación era determinar si las espinas dendríticas de las interneuronas y consecuentemente sus conexiones, también eran dinámicas y, por lo tanto, capaces de cambiar», señaló el profesor Nácher.