La Conselleria de Sanidad ha archivado la investigación abierta tras la denuncia que presentó un médico contra el jefe del servicio de Traumatología del Hospital Univeristario La Fe por presuntas coacciones a la hora de aceptar una plaza que salió en la bolsa de Sanidad. La Audiencia Provincial de València, por su parte, ha actuado del mismo modo y también ha archivado la causa. Así, tras la resolución judicial, la vía administrativa también queda zanjada al considerar «que no existían indicios suficientes para acreditar lo que el médico estaba denunciando», aseguraron ayer fuentes de la Conselleria de Sanidad.
El viernes 20 de mayo tuvo lugar una entrevista de trabajo en el despacho del jefe de servicio de Traumatología de La Fe. El traumatólogo afectado afirma que el jefe de servicio le dijo: «Ya sabes cómo funciona esto. Es mejor que no cojas la plaza». «Le pregunté si eso quería decir que coger la plaza me ocasionaría una situación desagradable, y él me respondió: ´Efectivamente, será una situación desagradable´». El denunciante, sin embargo, decidió aceptar un puesto de trabajo que habían rechazado las trece personas que se situaban en la bolsa por delante de él. Al siguiente día hábil de haber aceptado la plaza a la que tenía derecho, en contra de las indicaciones recibidas desde el propio hospital, le llamaron por teléfono de La Fe y le comunicaron que la plaza sacada a concurso, y que él había aceptado verbalmente, se retiraba. El lunes 23, tras llamar por teléfono a La Fe y confirmar que aceptaba la plaza, recibió una llamada del jefe de servicio, que le comunicó que había decidido retirar la plaza. «Voy a paralizar la solicitud, ¿eh? ¿Vale? Porque tengo la necesidad de organizarlo y lo tengo así organizado», se escucha en una grabación aportada al caso. Ya no había debate alguno. La plaza pasaba a la historia.
Sin embargo, ni las grabaciones ni el testimonio del denunciante han servido para probar lo que él considera «coacciones» y que la Conselleria de Sanidad y la Adudiencia Provincial califican de «conversaciones». No habrá pues, ni expedientes sancionadores ni repercusión alguna. Ni en una vía, ni en la otra; el caso de archiva.
Además, la Conselleria de Sanidad también ha suspendido el expediente que había abierto tras la denuncia de una médico del Hospital Clínico que recibió suspuestas presiones para rechazar, también, una plaza de trabajo. Es más, la facultativa difundió unas grabaciones para justificar su denuncia pero, finalmente, no se presentó a declarar en el juzgado y la Conselleria de Sanidad, por su parte, ha suspendido el expediente a la espera de que se resuelva el caso por la vía judicial.
De hecho, la denuncia de la anestesista del Clínico fue la que animó al traumatólogo de La Fe a dar a conocer un caso que no se considera lo suficientemente probado. Sin embargo, sobre la suspensión de la investigación de la anestesista del Clínico, fuentes de la Conselleria afirman que es «una actuación de oficio. Siempre que se abre una investigación judicial sobre el mismo tema de otra investigación administrativa se suspende, de oficio, la administrativa hasta que concluye la judicial».
