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Regulación

El ministerio edita una guía para dar un respiro a los municipios "inundables"

El manual de aplicación de Medio Ambiente ofrece alternativas para construir en zona de riesgo de anegamiento - L'Horta Sud decide mantener el recurso

La pista de Silla sería zona inundable dentro del Reglamento de Dominio Público Hidráulico. f. bustamante

El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama) ha elaborado un manual con el que los municipios valencianos que estaban amenazados por el Reglamento del Dominio Público Hidráulico (RDPH) tienen una alternativa para poder construir en las zonas declaradas como inundables. En algún caso, como Alfafar, la inundabilidad estaba decretada para el 94 % de su territorio.

El documento, titulado «Guía Técnica de apoyo a la aplicación del Reglamento del Dominio Público Hidráulico», permitirá a las Confederaciones Hidrográficas aplicar esta normativa de forma uniforme y limita el uso del suelo de las zonas inundables por razones de seguridad, aunque presenta dos variables que sí lo permiten.

En el quinto capítulo de la guía, el correspondiente a «actuaciones en zona inundable fuera de la zona de flujo preferente», se señala que se limita la construcción de equipamentos esenciales vulnerables frente a una inundación, pero teniendo en cuenta la magnitud de las zonas inundables en España, y especialmente en la Comunitat Valenciana, la letra b del punto 1 indica que de forma excepcional se pueden construir equipamientos teniendo en cuenta el riesgo de inundación, que la zona edificada no esté afectada por la inundación de 500 años de período de retorno y se asegure el acceso en situación de emergencias.

Para esto, el promotor tendrá que suscribir una declaración responsable sobre el riesgo de inundación, que pretende concienciar del riesgo existente y fomentar medidas de autoprotección.

Respecto a la otra alternativa, en los suelos ya urbanizados se puede edificar teniendo en cuenta las condiciones anteriores. Aunque esto supone una complejidad, la idea es que las partes nuevas estén a salvo de cualquier inundación, pero cada caso debe ser estudiado individualmente.

Conselleria cuestiona su validez

Por otra parte, fuentes de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del territorio cuestionan la validez de la publicación estatal al considerar que «no interpreta adecuadamente el Real Decreto del Dominio Público Hidraúlico», siendo esta muy amable y sin tener en cuenta la gran afección del mismo en la Comunitat Valenciana.

Desde la conselleria apuntan al período de recurrencia de 500 años, ya que el territorio valenciano es el más afectado por las inundaciones. Además, aseguran que el plan de prevención de riesgo de inundación valenciano, el Patricova, es mucho más fiable al tener mayor conocimiento de la comunidad autónoma.

También rechazan la necesidad de que las Confederaciones Hidrográficas o los Órganos de Cuenca informen sobre autorizaciones de zonas inundables de 500 metros, porque genera confusión y falta de seguridad jurídica. Este último hecho se solucionaría, de nuevo con el Patricova, por acercarse más a la realidad jurídico-urbanística de cada terreno. Por último, la Conselleria recuerda los contenciosos administrativos contra el Real Decreto que la Generalitat Valenciana y algunos municipios han interpuesto.

Hay que recordar que 12 ayuntamientos de l'Horta Sud (Albal, Picassent, Xirivella, Sedaví, Quart de Poblet, Silla, Aldaia, Alcàsser, Alfafar, Massanassa, Beniparrell y Picanya) presentaron en marzo un recurso administrativo contra el nuevo RDPH.

Este recurso lo encabeza el alcalde de Albal, Ramón Marí, que dijo que «el ministerio ha demostrado sensibilidad con los pueblos con Planes Generales aprobados». «Es una buena solución, ahora falta que la Generalitat actúe igual con el Patricova», pidió el primer edil albalense. A pesar de esta guía, Marí comunicó que seguirian adelante con el recurso porque «una cosa es la interpretación y otra la solución que solo pasa por la responsabilidad del promotor. La cartografía está mal hecha y aunque ahora me permitan llevar a cabo el plan general no sé si cuando sea necesario modificarlo se podrá realizar».

En Alfafar, el 94 % de su término estaba declarado zona inundable. Ahora con este manual «los técnicos ya tienen vía libre para bastantes proyectos, nos estaba complicando la admisión de informes y construcciones de una zona comercial», indica su alcalde Juan Ramón Adsuara, satisfecho por «el trabajo realizado».

Otros municipios de l'Horta Sud como Quart de Poblet, Beniparrell o Sedaví no pudieron dar su valoración porque los técnicos aún no habían realizado un informe.

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