La delegación del Gobierno trasladó a la Fiscalía los incidentes ocurridos durante la concentración de la Fundación DNAES a favor de la unidad de España en la plaza Mayor de Castelló. El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, considera los hechos sucedidos «extremadamente graves» e informó al fiscal «ante el seguimiento especial de la situación en Cataluña».

Varias personas accedieron a la terraza del Ayuntamiento de Castelló, y desplegaron una pancarta con el lema Li diuen democràcia i no ho és, al tiempo que lanzaron papeletas del referéndum convocado por la Generalitat y suspendido por el Tribunal Supremo. La acción fue reivindicada por un grupo denominado Brigades Antifeixistes de Castelló (BAF), a través de sus redes sociales. Los asistentes a la concentración intentaron acceder al edificio al grito de «a por ellos» ante lo la Policía Local tuvo que cerrar el ayuntamiento. No se consiguió localizar a los autores.

En València cientos de personas se concentraron frente al Ayuntamiento a favor de la unidad de España; y el arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, apeló a «la superación de todo odio, el entendimiento y la convivencia por parte de todos» en relación al procés.