El director adjunto del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), Joaquín Maudos, aseguró ayer que el traslado del Sabadell a Alicante obedece a la necesidad de «mejorar su imagen y evitar la fuga de depósitos de fuera de Cataluña». En su opinión, esa dinámica es la que explica el batacazo en días anteriores del banco en la Bolsa, porque «la fuga de depósitos implica que va a caer el negocio». El también catedrático de Análisis Económico de la Universitat de València considera que la citada decisión puede comportar que se produzcan ahora fugas de depósitos por parte de independentistas, «pero será menor porque la mayor parte del negocio del banco se encuentra fuera de Cataluña».

Joaquín Maudos afirma que los depositantes en general «deben actuar con una absoluta tranquilidad» y «no sobrerreaccionar porque al final va a ir en su propio perjuicio». Según este experto, no hay motivos para la preocupación, porque con seguridad existen planes de contingencia del Banco Central Europeo y del Banco de España, pero sobre todo porque los problemas reales no se producirían hasta que se consumara en realidad una eventual independencia de Cataluña. En ese supuesto, una entidad con sede en esa autonomía sí quedaría fuera del euro y de la supervisión del BCE, pero tal supuesto no se va a dar porque el Sabadell ya se ha cubierto la espaldas trasladándose a Alicante y CaixaBank tomará hoy idéntica decisión, aunque el lugar al que lleve su sede social no sea el mismo.