El acusado de estrangular a su tía abuela con un cable y sustraerle joyas, un televisor y dinero en efectivo de la casa que ambos compartían en Alicante, aseguró ayer en el juicio que lo hizo porque la víctima, de 88 años en el momento, tenía «un grado de dependencia del 100%», y le pidió «varias veces que acabara con su vida» debido a su estado de salud.

En la vista oral, que está previsto se prolongue hasta el viernes en el Tribunal del Jurado de la Audiencia, el Ministerio Fiscal ha confirmado su solicitud de pena de 22 años de prisión por el delito de asesinato (cometido el 5 de octubre de 2016) más otro año por el delito de hurto, pues el sospechoso presuntamente sustrajo un televisor, joyas y dinero en efectivo después de cometer el crimen.

No obstante, la pena puede que se atenue porque el acusado se entregó a la Policía cinco días después de los hechos, que confesó.. Según la fiscal, esto «demostró su arrepentimiento», y en su calificación provisional han optado por solicitar la pena máxima de 23 años de prisión, 22 años por asesinato más uno por hurto.

Por su parte, la defensa ha solicitado que se rebaje de asesinato a homicidio, ya que cuestiona que se produjera con alevosía -que la posición de superioridad del asesino le facilite la comisión del crimen-, requisito para que se considere asesinato, y ha incidido en que la víctima «le había pedido varias veces» al acusado «que acabara con su vida».

Los policías que instruyeron el atestado tras la confesión aseguraron que el asesino confeso les dijo que había matado a su pariente porque estaba «harto» de limpiar sus defecaciones, pues según ha puntualizado el propio acusado durante la vista, su tía «tenía un problema de incontinencia y había que cambiarla continuamente», y el día de los hechos le dijo que «no podía más». El cadáver lo encontraron «en una habitación cerrada y con una toalla colocada bajo la puerta para contener el olor».

Otro de los agentes afirmó que el acusado dijo haber vendido la tele y las joyas robadas para pagar la estancia en un hotel de la ciudad, lo que también fue confirmado por la Policía.