A la vicepresidenta de la Generalitat todavía le dura el disgusto y la indignación por el episodio que vivió el pasado miércoles por la noche, cuando un grupo de miembros de España 2000 enmascarados se apostó a la puerta de su casa con una gran bandera de España y cantando el himno con la letra franquista.

«Lo que yo viví no fue un escrache, quiero dejarlo claro. Un escrache es cuando un colectivo con una reivindicación política o social protesta en determinadas circunstancias ante un cargo público, a la luz del día, con la cara descubierta. Eso es un escrache», estalló en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, que se celebró en Alicante.

Ayer mismo se presentó también la denuncia correspondiente de la Abogacía de la Generalitat para que la Fiscalía investigue si se produjo algún delito de acoso, de odio o de desórdenes públicos, según se detalla en el escrito, al que ha tenido acceso este diario.

En la denuncia se hace un breve relato de los hechos y se adjuntan los vídeos tanto del equipo de Oltra, que grabó a los ultras, como de los propios participantes en el acto, ya que España 2000 colgó un documento propio en sus redes sociales. En ese vídeo se puede escuchar a José Luis Roberto, líder del partido de extrema derecha, narrando los hechos. «Estamos delante de la casa de nuestra amiga Oltra... a ver si quiere salir a sacarnos unos bocadillos. Le hemos puesto un poco de música española, porque estamos en España», se escucha.

«Ortiz debería retractarse»

A estos hechos se refirió ayer la secretaria general del Partido Popular de la Comunitat Valenciana, Eva Ortiz. La dirigente comenzó condenando los actos, pero terminó enfureciendo a Oltra. «Ha habido personas que han llevado al hemiciclo de las Corts camisetas con la cara de una persona y el lema 'Se busca'», apuntó Ortiz, en clara alusión a la camiseta que llevó Oltra cuando estaba en la oposición en la que mostraba la cara del entonces presidente de la Generalitat Francisco Camps, entre rejas.

«Yo me puse una camiseta donde ponía 'Wanted, only alive' -solo vivo-, en un momento en que el jefe del Consell eludía el control parlamentario», explicó Oltra. «Me resulta indignante que una dirigente de alto nivel compare la camiseta de Camps con los fascistas que con la cara tapada, con una máscara de un asesino en serio se plantaron en la puerta de mi casa. Si la señora Ortiz lo dice en serio, igual ya no hace falta España 2000, porque ya está ella. Debería retractarse porque es una barbaridad lo que ha dicho», condenó la también portavoz del Consell.

«El que quiera equiparar y mantener la equidistancia entre lo que pasó en mi casa y las reivindicaciones de un colectivo social que en un momento determinado dijeron 'basta' a que la gente se suicidara porque la estaban desahuciando, lo que están haciendo es dar cobertura a los nazis y a los fascistas. Están alimentando la mayor de las amenazas de la democracia», añadió Oltra. «Ortiz tiene que revisar urgentemente su cultura democrática si compara los hechos que ocurrieron frente mi casa, cuando nos amedrentaron a mí y a mis hijos, con la camiseta», lamentó Oltra.