A una semana de agotar el plazo legal para que el Consell lleve a las Corts el proyecto de ley de Presupuestos de 2018, las exigencias de Podemos y los roces internos entre conselleries mantienen bloqueadas las cuentas.

Podemos no venderá gratis sus preciados 12 votos en las Corts. Unos 300 millones en partidas presupuestarias alejan a los morados del acuerdo que preveían cerrar ayer. Pero los avances no han sido suficientes. Incluso el líder podemista, Antonio Estañ, detecta falta de valentía en el Consell para cumplir los acuerdos del Botànic y también descoordinación entre las conselleries para cerrar las cuentas del próximo año.

Ayer el voto de Podemos era un "no" o una abstención, pero queda una semana, tiempo suficiente para que sus exigencias (ver cuadro anexo) tengan cabida en en unos presupuestos que rondan los 17.000 millones.

Además, el tercer presupuesto de la era botánica registra también tensiones internas entre conselleries. El reparto de fondos es siempre complejo porque el gran bocado se lo llevan las conselleries sociales: Políticas Inclusivas, Educación y Sanidad, que tendrán los mayores incrementos en 2018.

En el caso de la conselleria de Mónica Oltra, los fondos comprometidos para la nueva renta de ciudadanía han sido objeto de meses de tira y afloja, ya que algunos miembros del Gobierno se negaban a que todo el escaso margen para hacer políticas propias recayera en Bienestar Social. Oltra tuvo que consensuar una implantación progresiva: 50 millones este año, pero casi 300 en 2.020. También el titular de Educación ha tenido que pelear recursos para acabar con los barracones, asignatura pendiente del Botànic y preocupación de Marzà, que en reuniones internas de Compromís admite que no eliminar las aulas prefabricadas puede pasarles factura.

Con los fondos sociales comprometidos, el margen para otras conselleries es escaso. De hecho, la propuesta de presupuestos de cada departamento supera las previsiones de Hacienda, que pidió un tijeretazo. Exceso que algunas fuentes cifran en 250 millones. Incluso algunos departamentos más políticos como Presidencia aspiran a crecer en el último año. La propuesta (unos 50 millones más que en 2017) ha escocido en otras conselleries.

Fuentes de la Generalitat, que ayer mismo informó a las Corts que no presentarán este viernes el proyecto, quitaron importancia al cambio de fechas e insistieron en que el documento se aprobará, como todos los años, dentro del margen legal, es decir antes del próximo 1 de noviembre.