Publicidad de casas de apuestas en las camisetas de grandes equipos de fútbol; personajes tan famosos como Cristiano Ronaldo, Rafa Nadal o Neymar Jr. promocionando casas de juego vía Internet y máquinas para hacer apuestas «online» en los bares, a las que es muy fácil acceder sin control. Estímulos que no solo llegan a los adultos, también a los menores que cada vez tienen más temprano su propio móvil con acceso a la red y, además, sin control paterno.
Los expertos en adicciones exigieron ayer medidas «urgentes» para atajar esta situación tras constatar que el problema de la adicción al juego también está llegando a los más jóvenes. Así lo pone de manifiesto el primer estudio realizado por la Conselleria de Sanidad sobre adicciones tecnológicas y juego patológico entre estudiantes de secundaria de la C. Valenciana: 12.540 alumnos de 14 a 19 años. Los datos son, cuanto menos, «llamativos»: el 10,8 % de los menores de entre 15 a 18 años encuestados reconoce hacer apuestas deportivas de forma «habitual». Ya sea a través de ordenadores, móviles o de máquinas en sitios públicos, estos menores reconocen que lo hacen «varias veces al mes». De hecho, de todos ellos, cerca de un 2,8 % tienen ya problemas de ludopatía o juego patológico, una tasa que, según pusieron ayer sobre la mesa los especialistas cuadriplica los indicadores de adicción al juego para la población en general de 18 a 65 años.
«Esto no quiere decir que los menores valencianos sean los que más problemas tengan, sino más bien que si se volvieran a hacer estudios en población general sobre juego patológico la tasa aumentaría sin duda por el boom de las apuestas online», explicaba ayer Julia Aguilar, técnico de la Unidad de Drogodependencias de Sanidad. La evolución de este mundo está siendo «súper rápida» y, aunque se desconoce qué evolución tendrán estos menores que ya tienen un problema, se ha detectado un aumento de casos en jóvenes adultos.
Más tratamientos por el juego
De hecho, se vio la necesidad de realizar este estudio tanto por la demanda que llegaba de padres y profesores «preocupados» como por el aumento de tratamientos en las unidades de conductas adictivas que se están dando a menores y jóvenes por la adicción a internet y al juego. «Aunque son pocos comparados con las drogas, va en aumento. Debíamos pararnos y ver qué estaba pasando para trazar estrategias desde los centros educativos», añadió Aguilar. Además de fomentar la educación en los colegios sobre la adicción a las nuevas tecnologías, los expertos exigen mayor regulación en la publicidad «como ya se consiguió con el alcohol y el tabaco».
Así, la aparición de personas famosos en la promoción del juego online es otra de las grandes preocupaciones de los profesionales.
Junto a las leyes nacionales -se está trabajando en la próxima ley del juego-, los expertos como Aguilar reclamaron también más educación pero para los padres. «Tienen que ser conscientes de los riesgos y poner una pautas de uso adecuadas», aseguró. «Si le das a tu hijo un móvil, no es suyo, es tuyo y tú debes tener el control y la frecuencia de uso también es una variable importante».
En el estudio han participado más de 12.000 alumnos de secundaria de 140 centros de toda la Comunitat.
