Minutos antes de que se celebraran los parlamentos en la explanada por parte de los dirigentes del Bloc, tuvo lugar el acto paralelo organizado por Esquerra Republicana del País Valencià (ERPV) en la Muntanyeta de la Patà. También allí se notó la tensión por la convocatoria de España 2000. A pocos metros se esperaba la llegada de sus miembros, que finalmente no aparecieron.

El montículo amaneció fuertemente protegido tanto por agentes de la Guardia Civil como por seguridad privada, aunque antes de su llegada alguien colocó banderas de España y «senyeres». Caso omiso hicieron los organizadores, que llevaron a cabo el Aplec sin incidentes. El acto contó con la presencia de la diputada de Esquerra Republicana de Catalunya Teresa Jordà, quien explicó a los medios que había venido a València «a coger fuerzas y muscularnos para todo lo que nos queda, el trabajo de construir una república». Hace un año también estuvo presente en la Patà, «pero en aquel momento fui incapaz de dar una fecha. Teníamos un sueño que se ha cumplido. Si hemos llegado hasta aquí es porque el pueblo siempre lo ha tenido claro», indicó la diputada.

Por su parte, el máximo dirigente de ERPV, Josep Barberà, señaló que el acto "reafirma la voluntad de una parte de la sociedad valenciana de seguir los pasos de lo que ha hecho Cataluña y empezar a caminar hacia una república del País Valencià". Barberà lamentó la convocatoria de la extrema derecha, al tiempo que aseguró que «se ha demostrado que no tienen músculo. Nosotros crecemos porque somos pacíficos».