El Instituto Valenciano de Infertilidad y el Club de Primeras Marcas de la Comunitat Valenciana han firmado este martes un "pionero" en España --sólo existe uno similar con Google, Facebook y Apple en EEUU--, que permitirá a las empresas que lo suscriban ofrecer a su plantilla condiciones ventajosas para la preservación de óvulos. El objetivo es dar a las mujeres mayor "libertad" a la hora de ser madres, una decisión que cada vez se retrasa más, fundamentalmente por motivos laborales.

Se trata de un acuerdo marco cuyas condiciones pueden mejorar las empresas que se adhieran y que en principio ofrece un descuento del 10% en la congelación de óvulos, así como los permisos y horas necesarias para desplazarse y someterse al tratamiento. Podrán solicitarlo tanto las empleadas de estas compañías, como los empleados cuya pareja podrá las mismas condiciones. Por el momento, ya han valorado acogerse al acuerdo Arroz Dacsa, Bodegas Vicente Gandia, Nunsys y Caixa Popular.

Así lo han anunciado en rueda de prensa la directora del IVI València, Amparo Ruiz; el profesor José Remohí; el gerente del Club de Primeras Marcas de la Comunitat Valenciana, Agustín Beamud y su presidente Juan Manuel Baixauli, quien ha señalado que "el 38,1% de las mujeres considera que tener un hijo entorpece su carrera profesional", lo que le lleva a retrasar su maternidad.

No obstante, a partir de los 35 años la mujer entra en un "declive fisiológico normal", ha avisado el profesor José Remohí, quien ha defendido la congelación de óvulos --a través de la técnica de la vitrificación a -196º para que mantengan la misma calidad que tienen en el momento se extraen-- para preservar la fertilidad. "Es un seguro de vida" para las mujeres que "abre una puerta" a la hora de decidir sobre su maternidad, ha argumentado.

"La segunda revolución para la mujer"

"Si en los años 50 la píldora anticonceptiva fue la primera revolución para la mujer, una revolución sexual, esta es la segunda revolución para darle libertad de maternidad, es la segunda revolución social para la mujer", ha reivindicado.

En este sentido, ha augurado que "dentro de 20 años todas las mujeres lo harán, todas", ha sentenciado, pues según el Remohí, "hoy la edad media avanza, lo 40 años de una mujer hoy en día no son los de antes, se come el mundo, tiene una capacidad tremenda y la inercia social lleva a postergar la maternidad", algo que puede llegar a ser "un problema grave reproductivamente".

Tanto es así, que el profesor cree que "llegará el momento" en el que congelar óvulos "se convertirá en una necesidad social y la Seguridad Social lo cubrirá. Pero no sabemos cuando", ha apuntado.

Según el especialista, preservar óvulos antes de los 35 permite conservarlos con calidad óptima, por lo que recomienda hacerlo "cuanto antes". A partir de los 40 "no vale la pena" médicamente hablando, "hay que ser honestos", ha avisado. Para implantarlos, pone el límite en los 50 años.

En la misma línea, la directora del IVI València, Amparo Ruiz, ha defendido que "tener óvulos preservados quita la ansiedad cada vez que la mujer cumple años". "Es una necesidad social que los Gobiernos tendrán que tener en cuenta en un futuro", ha apuntado. Mientras tanto, más allá del acuerdo suscrito este martes, la doctora ha recordado que vitrificar los óvulos cuesta alrededor de 3.000 euros y que el IVI ofrece planes de financiación para poder hacer frente al desembolso.

Precisamente para facilitar este proceso el acuerdo entre el IVI y el Club de Primeras Marcas de la Comunitat busca "ofrecer un beneficio social, una alternativa a las mujeres que trabajan en estas empresas" y se enmarca dentro de las "políticas sociales" de las empresas valencianas. "Vivimos en estrés, es difícil conciliar, hay que estar online, la velocidad es increíble", ha admitido, por lo que ha reivindicado todo aquello que "facilite la convivencia" entre la vida profesional, personal y familiar.

En estos momentos el Club de Primeras Marcas de la Comunitat Valenciana tiene 22 empresas "muy reconocidas" que suponen un volumen de facturación de unos 4.000 millones de euros y 25.000 empleados, que suponiendo que tengan pareja, el convenio con el IVI podría llegar a tener un alcance hasta para 50.000 personas, ha señalado el gerente del Club, Agustín Beamud.