La Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas ha sacado a licitación el servicio de 23 plazas de atención residencial en centros de protección de infancia en la provincia de València, para la atención de niños y adolescentes del sistema de protección que se encuentren bajo la guarda o tutela de la Generalitat, según publicó ayer el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).
La duración del contrato, con un importe base de licitación de 1.368.215,64 euros, será, como máximo, de doce meses a contar desde el día siguiente a su formalización, siendo la fecha límite de presentación de las solicitudes de participación el 29 de diciembre.
Estos contratos permitirán asegurar a la Conselleria de Igualdad la disponibilidad de plazas para el ejercicio de la medida de acogimiento residencial de menores cuya tutela o guarda ejerce, y la atención integral de menores cuando no es posible o adecuado el acogimiento familiar.
Asimismo, la licitación incluye dos lotes, uno que corresponde a siete plazas de atención en el centro de protección de infancia Amigó en Burjassot, y un segundo, con dieciséis plazas de atención en La Pobla de Vallbona.
La contratación del servicio para la puesta a disposición de la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de estas plazas, responde al nuevo modelo de atención en centros de acogimiento infantil.
Menos palzas por centro
Un modelo que, además del refuerzo de los equipos de contratación, favorece que los centros tengan una concepción lo más similar a un hogar. De esta forma, contempla reducir el número de plazas en los distintos centros.
Así, el nuevo modelo de atención residencial tiene como prioridad ofrecer una atención más individualizada y personalizada a las niñas y niños del sistema de protección de la Generalitat.
De esta forma, el objetivo del nuevo modelo se centra en impulsar un cambio de estrategia que permita el desarrollo de un modelo de atención inclusiva, comunitaria.
De igual modo se busca que la persona menor de edad sea lo importante, el objetivo de cada una de las acciones, mediante una respuesta individual a los daños emocionales que genera el desamparo, a través de la mejora de los recursos humanos y de las infraestructuras.
Por su parte, la inversión en el nuevo modelo, implica un aumento del 26,8 % del presupuesto respecto al modelo anterior, lo que permitirá, entre otras cuestiones, la contratación de 410 nuevos profesionales, con una bajada del ratio del 61 %, y la inclusión de nuevos perfiles profesionales como los mediadores interculturales o las técnicas o técnicos de igualdad de género.
