La Constitución atraviesa la crisis de los 40 años (le falta uno estrictamente), si se permite la trivialización. El conflicto catalán ha puesto en evidencia las lagunas de la carta básica de convivencia que los españoles se dieron en 1978 y los dos grandes partidos (PP y PSOE) han puesto en marcha una comisión de reforma del modelo territorial que habrá que ver si finalmente acaba en un proyecto de actualización de la Carta Magna. Los socialistas lo defienden, los populares son más reacios a dar un paso que un buen número de académicos considera necesario. En este contexto se acerca, con más actualidad que nunca, el Día de la Constitución. Levante-EMV lo conmemora en colaboración con la Universitat de València el próximo martes con un debate dentro del ciclo Claustre Obert que reunirá a cinco catedráticos valencianos.

¿Es el momento de reformar la Constitución? Es el título del acto y la pregunta de partida que sentará a los expertos ante el auditorio, pero el objetivo es reflexionar sobre otras cuestiones candentes: ¿la Carta Magna ha dejado de ser útil?, ¿cómo se debe afrontar su reforma, si se considera necesaria?, ¿ha de existir un consenso previo entre las fuerzas políticas o ha de ser la meta cuando se abra el diálogo?, ¿en ese supuesto debate han de participar solo los partidos o también los distintos territorios?

La pregunta final, y quizá la más importante, sea hasta dónde debe alcanzar la pretendida reforma: quedarse en cuestiones de detalle o entrar en profundidad con el bisturí.

Los puntos calientes son conocidos en el mundo académico y van más allá del encaje territorial, el de más urgente solución por la situación en Cataluña y los problemas de autonomía financiera del resto de comunidades. Pero el papel del Senado, la inclusión de la mujer como sujeto activo, los derechos digitales (para algunos tan importantes como los establecidos como fundamentales), el acomodo de las directrices europeas, el mantenimiento o no de las provincias, las nuevas realidades de la transparencia, el buen gobierno y la administración en red son algunos de los cambios que la sociedad española ha experimentado en los últimos 39 años y que esperan un reconocimiento normativo al más alto nivel.

Son asuntos que estarán sobre la mesa de debate el próximo martes. La discusión no parte de cero. Está el dictamen que el Consejo de Estado aprobó en 2004, favorable a cuatro modificaciones. Y está el documento con propuestas de cambio (el Senado, fundamentalmente) que diez catedráticos de toda España hicieron público el pasado 20 de noviembre. Como se ve, un buen número de ideas para iniciar un debate que Levante-EMV y la Universitat pretenden continuar en los próximos meses con nuevos foros sobre aspectos concretos de una reforma constitucional.