Los tiempos de la nueva política resultan vertiginosos. Ciudadanos adquirió peso como marca en las elecciones europeas de 2014, como Podemos. Pero apenas tres años y medio después, surge una escisión con vocación nacional. José Enrique Aguar, que fue alcalde socialista de Benetússer durante años con mayorías aplastantes, recaló en Ciudadanos convencido por el discurso de la regeneración, fue elegido diputado provincial a resultas de las municipales de 2015, dejó el partido de Albert Rivera y ayer se estrenó como primer líder de Contigo Somos Democracia (CSD).

El CSD se presenta como una formación centrista de carácter transversal. Aguar toma como referente al presidente de Francia, Emmanuel Macron, un especialista en inversiones que trabajó para el banco francés Rothschild, fue asesor económico del presidente socialista francés François Hollande, fue elevado a ministro de Economía y dejó ese cargo para aspirar a la Presidencia de la República al frente del movimiento político En Marche!, de carácter centrista, y fundado apenas cinco meses antes de las elecciones.

«Somos muy liberales en lo económico, creemos que no hay que interferir en el mercado», comentó Aguar de regreso a València al término del congreso que le proclamó presidente del CSD, «pero también sabemos que hay que destinar el gasto social a combatir las bolsas de rezagados que crea la economía de mercado. Hay que recaudar impuestos, desde luego, pero antes de nutrir las arcas del Estado hay que generar riqueza».

Las siglas CSD apelan al espíritu centrista que encarnó Adolfo Suárez al frente del Centro Democrático y Social (CDS) y que quiso emular Rivera al frente de Ciudadanos. Contigo nace para intentar rescatar ese impulso fundacional que consideran traicionado por Rivera. «Somos un partido realmente democrático», reitera Aguar, «algo que Ciudadanos ni es ni ha sido nunca».

Contigo empezó a gestarse en València hace apenas nueve meses. Se constituyó como plataforma cívica de ámbito autonómico en abril pasado para aspirar a las elecciones municipales y autonómicas previstas en mayo de 2019. Pero en mayo pasado se presentó en Valladolid en un congreso de concejales no adscritos. El CSD se registró como partido ante el Ministerio de Interior en julio pasado.

El nuevo partido cuenta con 960 afiliados. Son cargos públicos que han renunciado a las siglas por las que accedieron a su puestos. El 38 % de los afiliados son valencianos, pero hay agrupaciones en Andalucía, Murcia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunitat Valenciana, Madrid y Cataluña. Aguar apunta que también hay agrupaciones en la ciudad autónoma de Ceuta y un embrión de agrupación extremeña con agrupaciones en Mérida y Cáceres.

Ante el problema catalán, Aguar defiende que la Constitución necesita «un meneo». «Fraga y Carrillo fueron maravillosos en su día, pero vivimos otros tiempos, otras libertades», concluye.