Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Contaminación

La manipulación de las emisiones de los camiones 'verdes' llega a València

Una campaña de vigilancia pionera de la Policía Local de Picassent permite denunciar en mes y medio a 11 transportistas españoles y extranjeros por llevar "emuladores" que anulan el sistema de reducción de gases contaminantes

"Emulador" de Adblue detectado por la Policía Local de Picassent en el cuadro de fusibles de un camión. L-EMV

Una pionera campaña de vigilancia, sin precedentes en España a nivel municipal, de la Policía Local de Picassent ha disparado las alarmas sobre lo extendido que puede estar en la Comunitat el fraude de los «emuladores» de Adblue en el transporte por carretera. Estos chips anulan el sistema que reduce hasta un 90 % las emisiones de los peligrosos óxidos de nitrógeno (NOx) de los motores diésel "ecológicos" de los camiones más modernos, convirtiéndolos en auténticas máquinas de contaminar.

En el último mes y medio la Policía Local de este municipio de l'Horta Sud ha denunciado a 11 camioneros, la mitad de ellos extranjeros, por infringir la Ley 34/2007 de calidad del aire y protección de la atmósfera al llevar instalados "emuladores" de Adblue. Hasta ahora sólo la Policia Foral de Navarra había desarrollado en España una campaña sistemática de control de la manipulación de las emisiones de los camiones "verdes". En marzo pasado, tras cuatro meses de vigilancia, los agentes autonómicos navarros llegaron a multar a 25 transportistas.

Desde hace una década la legislación europea, con el fin de cumplir el Protocolo de Kioto, ha ido endureciendo las exigencias de reducción de gases contaminantes de los motores diésel de los camiones de más de 3,5 toneladas de Peso Máximo Autorizado (PMA).

Esta normativa plasmada a través de las sucesivas órdenes Euro 4 (2007), Euro 5 (2009) y Euro 6 (2014), ha reducido en un 90 % las emisiones de NOx, un grupo de gases compuestos por óxido nítrico (NO) y dióxido de nitrógeno (NO2). Este último, el llamado gas coche al haberse disparado sus emisiones con la expansión del motor diésel, tiene graves efectos sobre la salud al estar relacionado con el aumento de problemas cardíacos y respiratorios o la disminución de la capacidad de atención de los niños.

Beneficios por no contaminar

Desde hace tres años, todos los camiones de nueva matriculación deben cumplir con la Euro 6, que limita la emisión de óxidos de nitrógeno a 0,4 gramos por kilovatio hora (g/kWh). Gracias a este estándar son considerados vehículos verdes u ecológicos, por lo que cuentan con beneficios fiscales.

Para reducir las emisiones el sistema más empleado por los fabricantes de motores es el de la reducción catalítica selectiva (SCR). Este método emplea un solución de urea diluida al 32,5 % en agua desmineralizada, cuyo nombre comercial es Adblue. Un fabricante de este aditivo ya denunció en abril ante la Fiscalía de Barcelona el fraude de los emuladores al alertar que uno de cada 10 camiones estaría circulando con estos chips.

El dispositivo, que se puede comprar desde 70 euros y se oculta en el cuadro de fusibles del vehículo, engaña al ordenador de a bordo del camión informado que el depósito de Adblue siempre está a la mitad.

Sin el chip, cuando el depósito del aditivo se vacía, el sistema informático reduce la potencia del motor de 500 a 100 caballos para rebajar las emisiones, con lo que obliga al vehículo a parar y repostar.

El impacto económico del consumo de Adblue es muy bajo, unos 1,25 euros cada 100 km. Por tanto, no tiene sentido arriesgarse a una multa por un coste así. Tras el fraude de los "emuladores", según fuentes de la Policía de Picassent, estarían otros problemas como la rotura del catalizador, cuya reparación cuesta más de 5.000 euros.

El llevar este "emulador" comporta una doble sanción. En primer lugar es una infracción al Reglamento General de Vehículos, lo que supone una multa automática de 200 euros, que se reducen a 100 por pronto pago. Y en segundo lugar una infracción leve con multa de hasta 20.000 euros a la Ley 34/2007 de calidad del aire. Otros países como Holanda, ante la preocupación por la expansión del fraude , han arbitrado multas de hasta 25.000 euros y penas de dos años de prisión por delito ecológico.

Las primeras denuncias en la CV

Estas 11 denuncias a camiones emitidas por la Policía Local de Picassent por infringir la Ley de calidad del aire con "emuladores" de Adblue son las primeras de las que se tiene noticia que se remiten a la Conselleria de Medio Ambiente, que es a quien le corresponde iniciar el expediente sancionador.

València y su área metropolitana es una de las siete zonas más contaminadas de España por NO2 -lleva los tres últimos años superando el valor límite anual para la protección de la salud-, y según el nuevo satélite 'Sentinel-5P' de la ESA para la vigilancia de la calidad del aire, también es una de las áreas de Europa más afectadas por este gas. Por ello, y pese a contar con el puerto con mayor tráfico de contenedores del país, sorprende que estas sean las primeras denuncias por el fraude de Adblue que se conocen.

Compartir el artículo

stats