El nieto de José Calvo Sotelo gana la primera «batalla» en defensa del honor de su abuelo y que su nombre siga presidiendo la placa que da nombre a la céntrica plaza alicantina.

Un juez ha aceptado que este descendiente del diputado conservador asesinado en 1936, antes de que se iniciara la Guerra Civil, pueda litigar contra el Ayuntamiento de Alicante por la correcta aplicación de la Ley de Memoria Histórica en relación a la intención del Consistorio de cambiar el nombre de esta plaza.

El titular del juzgado de lo Contencioso-Administrativo 3, José María Magán, rechazó las alegaciones formuladas por los servicios jurídicos de la corporación y reconoció la legitimidad activa de Santiago Calvo-Sotelo Olry de Labry para interponer su demanda, como se recoge en un auto al que ha tenido acceso Efe.

El consistorio, entonces gobernado por un tripartito (PSPV-PSOE, Compromís y Guanyar Alacant), decidió en noviembre de 2016 cambiar el nombre de 46 calles, avenidas y plazas de la ciudad, entre ellas la de Calvo-Sotelo, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica.

Unos meses después, cuando ya se habían sustituido la mayoría de esas denominaciones, la juez de lo Contencioso-Administrativo 4, Begoña Calvet, ordenó la paralización cautelar de la medida del Ayuntamiento y la reposición de los antiguas placas.

Mientras tanto, el consistorio ya había repuesto las antiguas placas de las vías afectadas, pero no así otras que las acompañan con una breve explicación del personaje a la que están dedicadas, como en el caso de la plaza de Calvo-Sotelo. Un nieto del político, interpuso un recurso para que se excluya la plaza en honor a su abuelo de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica.