El PPCV se volcará con sus homólogos catalanes el próximo jueves, unas elecciones claves para Cataluña y el resto de España y en las que los populares temen un descalabro monumental.

Más de un centenar de afiliados (cargos públicos y militantes de base) tienen ya hechas las maletas para desplazarse y servir de apoderados e interventores en las mesas.

En realidad, la colaboración del PPCV con los populares de Xavier García Albiol viene de lejos y es casi una tradición que envíe refuerzos a una comunidad donde el partido de la gaviota es una fuerza minoritaria.

No obstante, la cita del jueves es fundamental, ya que el resultado tendrá una repercusión nacional y condicionará también la política valenciana. La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, estuvo este fin de semana en Tarragona y ayer repitió escenario. Se trasladó a Tortosa, donde tuvo un encuentro con militantes.

Génova, que se juega mucho en Cataluña, ha movilizado a sus dirigentes autonómicos y Bonig es una de ellas. Fuentes del PPCV precisaron que el debate de los presupuestos de la Generalitat en Corts impedirá que Bonig asista a más actos en Cataluña.

El PP valenciano está muy pendiente del resultado electoral, ya que condicionará también su estrategia. Un hipotético nuevo gobierno en Cataluña con fuerzas constitucionalistas sería muy diferente a la reedición del soberanista, que usa como elemento comparativo contra el tripartito.